Más de 800 mil millones de dólares se esfumaron de los mercados de criptomonedas globales en las últimas semanas, a medida que se desvanece el entusiasmo que invadió la criptoindustria después de la victoria electoral de Donald Trump el año pasado.El precio del bitcóin cayó hasta 3.6 por ciento ayer, lo que elevó sus pérdidas en el último mes a 15 por ciento. Otros tókenes sufrieron pérdidas mayores, ya que los criptoactivos se ven arrastrados por una venta masiva de herramientas de riesgo, y el robo de criptomonedas más grande de la historia sacude la confianza en la industria.Los operadores también empiezan a sentirse frustrados porque Trump no ha actuado más rápido para promulgar algunas de las reformas que prometió en la campaña electoral.“El despliegue más lento de lo previsto de cualquier política importante a favor de las criptomonedas provocó decepción”, dijo Gadi Chait, gerente de inversiones de Xapo Bank.El valor nominal de la industria de las criptomonedas registra una caída de 810 mil millones de dólares desde su máximo de enero, según CoinMarketCap.Los inversionistas retiraron casi mil millones de dólares de los fondos cotizados en bolsa de bitcóin el martes, de acuerdo con Bloomberg, ya que la caída cada vez más profunda provocó un éxodo récord de los vehículos que ayudaron a impulsar los precios de las criptomonedas a máximos históricos a finales del año pasado. El aluvión de aranceles de Trump también asustó a los inversionistas y los hizo huir de los activos de riesgo, incluidas las criptomonedas.Algunos operadores esperaban que, bajo el gobierno de Donald Trump, Estados Unidos comenzara a comprar bitcóin y promulgara rápidamente nuevas reglas para alentar a las grandes instituciones financieras a comprar criptomonedas e invertir en el sector.Pero el movimiento más destacado del nuevo presidente fue el lanzamiento de un llamado memecóin en enero. El precio del tóken se desplomó 83 por ciento desde un máximo breve, y Trump enfrentó una reacción negativa generalizada por su lanzamiento.Michael Dempsey, socio gerente de la firma de capital de riesgo Compound, indicó que Trump “abandonó los memecóins”, allanando el camino para que otros políticos siguieran su ejemplo, y con ello “destruyeron efectivamente el mercado durante al menos un par de meses”.Los recientes escándalos de alto perfil también se ciernen sobre la industria como un obstáculo.Un memecóin que promovió el presidente de Argentina, Javier Milei, este mes se desplomó rápidamente en valor, lo que dejó a los inversionistas enfrentando fuertes pérdidas, mientras que el lanzamiento de Melania Trump, también generó críticas.La semana pasada, mil 500 millones de dólares de ethereum, la segunda criptomoneda más grande a escala global, fueron robados de la bolsa Bybit en el mayor hackeo hasta la fecha, lo que reavivó las preocupaciones sobre la seguridad de los tókenes digitales en poder de los centros de operaciones.Por otro lado, el precio del ethereum ya registra una caída de 23 por ciento durante el último mes, mientras que solana, el tóken que representa al blockchain que alberga la mayoría de las memecóins, se ha desplomado 42 por ciento.“Lo que las criptomonedas están digiriendo justo en este momento es el fin del auge para las memecóins”, explicó Matt Hougan, director de inversiones del gestor de activos cripto Bitwise. Añadió que hasta que el interés institucional en las divisas digitales regrese, “la pérdida de energía creará un lastre para todo el mercado”.Dempsey, de Compound, añadió que muchos entusiastas de las criptomonedas “sobreestimaron materialmente el impacto positivo que podía tener Donald Trump en ese ámbito”.Las salidas de los ETF de bitcóin, que superaron el máximo diario anterior de 671 millones de dólares, se producen en un momento en que grandes actores tradicionales como los planes de pensiones de los estados de Wisconsin y Míchigan realizaron asignaciones a bitcóin.Geoff Kendrick, director global de investigación de activos digitales en Standard Chartered, estimó que el precio de compra promedio de los ETF de bitcóin desde las elecciones presidenciales de Estados Unidos fue de alrededor de 97 mil dólares por moneda, lo que significa que los compradores durante ese periodo perdieron de manera colectiva alrededor de mil 300 millones de dólares.