El Consell rectificará la Ley de la Huerta ante las quejas agrarias
El pasado 4 de enero el presidente de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja), Cristóbal Aguado, abrió batalla contra la Conselleria de Agricultura al criticar que no hubiera tomado ningún partido en la elaboración de la Ley de la Huerta. Una norma que afecta de manera directa a los productores y que considera, dijo Aguado, al campo como a un «decorado» y a los agricultores como los «personajes en escena». Las críticas de Aguado contra el Departamento dirigido por Elena Cebrián, surtieron efecto.
Preocupados por las quejas de un importante sector para el Consell, representantes del PSPV y de Compromís se pusieron enseguida en contacto con AVA para iniciar conversaciones. Tras mantener los primeros encuentros, en los que participaron Manuel Mata y Rafael Briet por parte de los socialistas y Fran Ferri desde Compromís, desde la organización se muestran esperanzados en que el Consell realice los cambios que se han solicitado.
La primera de las modificaciones que se va a producir es precisamente que la Conselleria de Agricultura participará en la elaboración del plan agrario que acompaña al proyecto de ley de esta norma, que fue aprobado en Les Corts a principios del pasado mes de diciembre, y que se encuentra en fase de presentación de alegaciones.
«Nos da la sensación de que están empezando a hacer lo que deberían haber hecho desde un principio», apuntan fuentes de la asociación agraria.
Aparte del agrario, el proyecto de Ley deberá anexar un plan de acción territorial, que será elaborado por la Conselleria de Infraestructuras. Desde AVA reclaman que estos dos documentos se aprueben de manera simultánea (sin dar más importancia al territorial que al agrario) y que cuenten con un presupuesto suficiente y realista.
Además, se ha presentado un nuevo pliego de alegaciones, en el que se solicita la modificación o directamente la supresión de algunos artículos de la norma. Uno de ellos es la definición de suelo agrario abandonado. Según la Ley de la Huerta del Consell, si un agricultor lleva dos años sin cultivar su terreno, se le expropia. Desde AVA consideran que si ese productor ha detenido la producción por falta de rentabilidad, debería ser excluido de este supuesto. «Si consiguen que el sector agrario sea rentable, no habrá suelo abandonado».
Reclaman también que se eliminen de la norma aquellas disposiciones que pudieran hacer de «cortapisa» al avance en la modernización de las infraestructuras agrarias y compensar a los agricultores a los que no se les permita efectuar determinadas actuaciones en el campo.