La Junta espera que el abono cinco años después de la paga extra de 2012 a los funcionarios «reactive el consumo»
La consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, señaló ayer que el abono en el mes de febrero de la última parte de la recuperación de la paga extraordinaria de 2012 «puede venir bien al aumento del consumo» y anunció que para este año espera aplicar más mejoras retributivas a los empleados públicos andaluces.
En declaraciones difundidas desde la propia consejería, Montero valoró que ese pago «manifiesta el compromiso del Gobierno andaluz con los empleados públicos y muestra nuestra lealtad al pacto firmado con las organizaciones sindicales mayoritarias presentes en la Mesa General».
«En la nómina de febrero se abonará la última parte, correspondiente a la recuperación de la paga extraordinaria de 2012, lo cual significa una inyección económica para el conjunto de los empleados públicos, que puede venir bien en febrero, un mes complicado para las familias», por lo que este abono «puede ayudar a contribuir al nivel de consumo que procure el desarrollo económico de la comunidad».
La titular de Hacienda y Administración Pública insistió en que la previsión de la Junta para 2018 es que «podamos incrementar y hacer la subida salarial a los empleados públicos que ya hemos cuantificado en los Presupuestos de la Comunidad del 1,5 por ciento de subida y que está pendiente de la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado».
Montero añadió que «en la medida en que se vayan incorporando otras mejoras retributivas de jornada, la comunidad las irá aplicando en el marco de sus competencias».
No todo es satisfacción entre los empleados públicos después de que el BOJA publicara la resolución en la que se recoge el abono de la cuarta y última parte de la paga extra correspondiente al año 2012. El Sindicato de Enfermería (Satse) reclamó que «no se demore más la devolución del resto de los recortes que aún a día de hoy se mantienen al personal sanitario público andaluz». Según sus datos, «fruto de todos los recortes impuestos en los últimos ocho años, el conjunto de los trabajadores de la sanidad pública ha llegado a acumular una pérdida del 30 por ciento del poder adquisitivo».
Por su parte, el sindicato FSIE, referente en la educación concertada andaluza, reclamó a la Junta que se recupere el concepto de paga extraordinaria de antigüedad de la empresa.