El acuerdo alcanzado por el Gobierno italiano con la Comisión Europea ha calmado al mercado y alejan el riesgo de inestabilidad financiera para el país a corto plazo, pero nadie está satisfecho con la solución. Dombrovskis, desde Bruselas, ha asegurado que "no es un acuerdo ideal", pero evita las sanciones. El vicepresidente Salvini ha cantando victoria en Italia y ha prometido aplicar en el "tiempo establecido" la reducción de la edad de jubilación, lanzar la renta básica y bajar impuestos. Los funcionarios europeos siguen señalando que las medidas anunciadas y los presupuestos son preocupantes.