Menas en la costa
Durante más de dos siglos, los piratas musulmanes asolaron nuestras costas. Para avisar de sus posibles ataques se construyeron una serie de puestos de defensas y torres, muchas de las cuales podemos ver todavía. En aquellos tiempos se popularizó la expresión «no hay moros en la costa», para indicar que no se vislumbraba peligro en aquel momento. En la actualidad, la llegada de barcos piratas ha sido sustituida por auténticas oleadas de otro tipo de embarcaciones repletas de inmigrantes ilegales. Читать дальше...