No estará en los Goya ni en las listas de lo más visto del año, pero «Ni te me acerques» es historia del cine español: la primera película escrita, rodada y estrenada entre ola y ola de la pandemia que nos arrastra. En menos de cinco meses, el productor –y guionista, director y lo que haga falta– Norberto Ramos del Val pasó del confinamiento de su casa a confinarse con un equipo de 12 personas en el hotel-balneario de Ariño (cerrado por la crisis del coronavirus) para filmar lo que ha llamado una «comedia pandémica» sobre un aprendiz de escritor que, mientras vigila un hotel vacío, trata de culminar su obra maestra. Termina por volverse medio loco, tanto como este...
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