El sacrificio de Céspedes no fue estéril
BAYAMO, Granma.— El Padre de la Patria, Carlos Manuel de Céspedes, fue recordado este sábado en la Plaza de la Revolución, en Bayamo, un sitio donde también él lanzó el grito de «Independencia o Muerte».
A 147 años de su caída en combate en las montañas de San Lorenzo (27 de febrero de 1874), el historiador Ludín Fonseca García sentenció que el sacrificio del Iniciador no fue en vano, pues su esfuerzo gigantesco preparó la conciencia de la nación cubana para retos futuros y sus hazañas se abrieron paso entre las sombras de quienes pretendieron relegarlo.
En una ceremonia sencilla, ajustada a los nuevos protocolos sanitarios, Fonseca aseguró que el Hombre de La Demajagua tuvo que sortear numerosos obstáculos en su lucha, incluso los que nacieron de las rencillas y pasiones de algunos independentistas.
El ilustre abogado bayamés resultó superior a las pasiones que desgarraban a los cubanos de entonces «al declarar que no se opondría por la vía militar a su deposición como Presidente de la República en Armas, que por él no se derramaría sangre en Cuba», expuso el investigador.
«Se había retirado a San Lorenzo porque consideraba esta posición segura, aunque tenía la premonición de que su muerte ocurriría en los campos de Cuba libre. Allí estaba el Iniciador, sin escolta, enseñando a leer a los niños», dijo Fonseca sobre los últimos días de Céspedes.
Añadió que en esas serranías sostuvo desigual pelea con su revólver y murió defendiendo las ideas que había enarbolado durante más de 25 años, que eran las más avanzadas del siglo XIX.
Antes del acto, se celebró la vistosa ceremonia de las banderas, en la que se izan solemnemente el estandarte nacional y el que enarboló Carlos Manuel de Céspedes en La Demajagua.
En la evocación participaron dirigentes políticos y gubernamentales de Granma, encabezados por Wilber Jerez Milanés, miembro del Buró provincial del Partido, y la vicegobernadora Yanetsy Terry Gutiérrez, quienes depositaron ofrendas florales ante las estatuas del Padre de la Patria y de Perucho Figueredo, autor del Himno Nacional.