«Acabaremos con la asfixia regulatoria y fiscal que suponen los 15 tributos propios que pagan las empresas en Cataluña, simplificándolos y dejando, como máximo cinco, que es la media que tienen el resto de comunidades autónomas». Esta fue una de las promesas con las que el candidato del PSC a la Generalitat, Salvador Illa, concurrió a las elecciones catalanas. Un enunciado que reconoce que si las compañías catalanas pagan muchos más impuestos que las madrileñas no es por el 'dumping' del que se acusa a la región central sino por la «asfixia regulatoria y fiscal», en palabras de Illa, que practica la Generalitat para sufragar la aventura independentista.
Frente a los quince tributos propios implantados en Cataluña —cinco cánones, un gravamen... Ver Más