Inés Arrimadas exige a Pedro Sánchez una respuesta a la altura del «desafío a la integridad de España» en Ceuta
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«Esto no es solo una crisis migratoria. Esto es un desafío a la integridad de España y a las fronteras europeas. Por tanto, requiere una respuesta a la altura de la gravedad», ha afirmado Arrimadas en la escalinata del Congreso de los Diputados, donde ha ofrecido declaraciones a los medios tras su encuentro con asociaciones de la Guardia Civil.
La líder de los liberales se ha puesto en contacto con el presidente de Ceuta, Juan Jesús Vivas, a quien le ha trasladado su solidaridad y apoyo, así como a las Fuerzas Armadas, a la Guardia Civil y a la Policía Nacional. Arrimadas también ha llamado al Gabinete de Pedro Sánchez para solicitar «unidad» en la respuesta a una crisis sin precedentes, consecuencia de un conflicto diplomático con Marruecos.
El país vecino permitió el acceso a Ceuta de 2.700 inmigrantes a nado, que continuó durante la madrugada por distintas vías hasta acercarse a la cifra de 6.000 entradas ilegales en territorio español. A tenor de las imágenes vistas desde ayer, el Ejército ha desplegado hasta cuatro vehículos blindados para detener la oleada migratoria.
Arrimadas ha insistido en que Ceuta no es solo frontera sur de España, sino de la Unión Europea. Por lo que ha pedido también a Sánchez que lidere la petición de una «misión urgente» de las instituciones europeas. «Esto es un desafío a las fronteras europeas y a la integridad territorial de nuestro país», ha remarcado, en repetidas ocasiones.
«Utilizar todas las vías»
«Esto se debe a una crisis diplomática en la que el
Gobierno de España
no ha sido consciente del desafío que teníamos encima. Esta crisis afecta a toda Europa. El Gobierno debe hacer una buena gestión interna de respuesta a Marruecos y desde luego liderar esa respuesta europea de la misma magnitud que la gravedad de la situación. Es una afrenta y un ataque a las fronteras europeas», ha añadido la líder de Cs, quien ha abogado por «utilizar todas las vías» para resolver la crisis: la diplomática, la de seguridad y la europea.
Según ella, España debe reclamar tener un peso mayor en Frontex y hacer valer que tiene fronteras con terceros países que no son miembros de la Unión Europea.