La CNMV advierte del «riesgo reputacional» por la imputación de directivos de empresas cotizadas

El presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Rodrigo Buenaventura, advirtió hoy del «riesgo y desgaste reputacional» que supone para otras compañías la imputación de directivos, sin dar nombres propios pero en clara alusión al presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán. Durante su intervención, en el seminario «La economía de la pandemia», organizado por la APIE y BBVA, en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) en Santander, Buenaventura remarcó que también existe un «riesgo diferido» para el conjunto de las compañías cotizadas.


En este sentido, Buenaventura recordó que hace ya casi dos años, en noviembre de 2019, el supervisor envió un comunicado en el que fue «contundente» con situaciones similares. Preguntado por los periodistas sobre la idoneidad de mantener a estos ejecutivos al frente de las empresas, Buenaventura señaló que el tema debe ser valorado por los consejos de administración de cada compañía afectada: «Eso corresponde a las sociedades cotizadas y a sus dueños», señaló


No obstante, el presidente de la CNMV puntualizó que se trata de «casos aislados» y añadió que los ejecutivos españoles tienen estándares éticos tan elevados como los de los países del entorno.


Reclamaciones por 800 millones
El presidente del regulador también advirtió de un aumento del fraude en la publicidad de criptomonedas, pero también por otros delitos en la Red como el 'phishing' o la clonación de páginas web oficiales. Así, Buenaventura cuantificó en 800 millones de euros los daños reclamados en relación con estos delitos y habló de «pico histórico» entre febrero y mayo en cuanto al número de consultas y comunicaciones recibidas sobre casos de fraudes en el canal de la CNMV.


«El fraude financiero es como un globo y la cuestión es pincharlo lo antes posible porque nunca vamos a ser capaces de erradicar la conducta. Se trata es de detectarla antes de que adquiera una dimensión en la que el daño social sea ya muy importante y ahí ya entran mecanismos de cooperación para mejorar los sistemas de alerta temprana y de intercambio de información», añadió Buenaventura. Para erradicar estas conductas, el presidente del regulador avanzó contactos con el Ministerio de Asuntos Económicos. «Estamos empezando a tener contactos con otras instituciones del Estado, espero que en los próximos meses veamos algunas iniciativas», añadió Buenaventura, en línea con lo adelantado por la vicepresidenta Nadia Calviño sobre un plan contra el fraude en coordinación con los supervisores.