El Barça pone precio al Camp Nou
El Barcelona se enfrenta a una decisión tan polémica como la que adoptó en 2006 cuando decidió poner publicidad en el pecho de la camiseta del primer equipo, algo inconcebible para los socios, que consideraban inadmisible 'manchar' la zamarra. Durante cuatro años se promocionó a Unicef, la base para que después llegaran Qatar y Rakuten. Ahora, el club azulgrana pretende ponerle nombre al Camp Nou para lograr unos ingresos con los que poder acometer la remodelación de las instalaciones y sanear su maltrecha economía. Una decisión que irá ligada a la aceptación por parte del socio de permitir a la actual directiva solicitar un crédito de 1.500 millones de euros para afrontar el proyecto 'Espai Barça', con el que el club azulgrana aspira a remodelar el Camp Nou, construir un nuevo Palau Blaugrana y reformar todo el entorno urbanístico en el que están sus instalaciones.
«El tema del 'naming right' (técnica publicitaria para ponerle el nombre a un recinto) del Camp Nou está bastante avanzado», desveló Ferran Reverter. El director general del Barcelona añadió: «Estamos valorando ofertas y éstas van de 10 a 20 años. 400 millones son cifras de las que estamos barajando por 20 años», aseguró. Desde el club se quieren dar prisa en cerrar el acuerdo porque son conscientes de que aumenta la credibilidad a la hora de solicitar una financiación del calibre que pretenden.
Será una decisión tan histórica como obligada por la coyuntura económica del club. Todos los socios han sido convocados el 19 de diciembre para un referéndum en el que, por primera vez en la historia de la entidad catalana, se podrá votar de forma telemática. El impacto y la cuantía de la operación merece una profunda reflexión por parte de todos los abonados del club, que deberá solicitar un crédito de 1.500 millones de euros para afrontar las obras. Aunque no está confirmado, Goldman Sachs se perfila como la banca que prestará la cantidad. La relación de Laporta con el fondo de inversión es excelente, como se comprobó con la inyección económica (595 millones de euros) que el Barcelona recibió cuando el presidente inició su segunda etapa en el club.
Los socios votarán en referéndum si permiten a Laporta pedir un crédito de 1.500 millones para poner en marcha el 'Espai Barça'Laporta quiere dejar muy claro que el 'Espai Barça' se autofinanciará. «No costará dinero a los socios ni socias. No será un aumento de los gastos y no pondrá en riesgo el patrimonio ni debilitará la gestión deportiva», aseguró el presidente. Reverter fue el encargado de detallar todos los gastos y las partidas: «Calculamos una inversión de 1500 millones, pero es un proyecto a cuatro años y pueden pasar muchas cosas. Es un cálculo muy realista, pero siempre puede haber imprevistos. 900 millones serán para el Camp Nou, 420 para el Palau y el Petit Palau, la pista de hielo y la estación de autobuses. 100 millones para el campus, 60 millones más para la modificación del plan metropolitano y 20 para el Estadi Johan Cruyff», desgranó. Unas cantidades que se disparan con respecto al proyecto inicial, tasado en 600 millones de euros. «Se han gastado 145 millones y solo se ha realizado el cinco por ciento de la obra», lamentó Laporta.
La clave, por tanto, es conseguir esos 1.500 millones de euros y para ello necesitan el permiso del socio. El club intentará lograr el crédito, a 35 años y con un tipo de interés que dependerá del mercado. La intención es iniciar las obras del Camp Nou a mediados de 2022 y acabarlas a finales de 2025, lo que obligará a jugar los partidos de local fuera durante el segundo año, pero sin salir de la ciudad. Aunque no está decidido, Montjuïc se presenta como la opción más factible. En la temporada 2022-23 se podrá jugar en el estadio, pero solo con una parte de la grada habilitada, al igual que en las dos últimas de la obra.
Para convencer al socio de que este endeudamiento no perjudicará a la parcela deportiva, Reverter aseguró que no impedirá que se acometan fichajes y, de hecho, confirmó que el Barcelona acudirá al mercado de invierno para reforzar su plantilla. «El Barça podrá fichar en invierno y en verano, pero se tiene mirar muy bien esos fichajes. Y por supuesto que podremos renovar a Dembélé», aseguró. Ferran Torres, del City, es el gran objetivo.