El hermano de Iñaki Urdangarin se enfrenta con un reportero de 'Sálvame' en directo
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Si ayer el programa de Cuatro ‘Ya es mediodía’ desvelaba quién habían mandado tomar las instantáneas de la infidelidad y buscaba las declaraciones de la madre del exduque de Palma, pocas horas después Mikel Urdangarin, hermano de Iñaki, protagonizaba un enfrentamiento con Kike Calleja, reportero de 'Sálvame'.
‘Sálvame’, que igual que otros programas está siguiendo de cerca esta historia, envió a uno de sus reporteros, en concreto a Kike Calleja, a Vitoria para que consiguiera algunas palabras de algún miembro de la familia Urdangarin. En medio de una conexión en directo el reportero comentó a los compañeros que se encontraban en el plató de 'Sálvame' que el círculo familiar estaba «bastante tenso», a lo que añadía que el miércoles habían hablado «con su madre», que les dijo que estaba «muy agobiada».
También les contó que esa misma mañana –por el día de ayer– habían conseguido hablar con uno de los hermanos del exduque de Palma, con Mikel Urdangarin. «Le hemos preguntado qué le parece toda esta polémica, qué le parece Ainhoa y qué tiene que decir sobre el divorcio. La verdad es que no se lo ha tomado muy bien», indicaba el periodista.
A continuación, 'Sálvame' emitió el vídeo con las imágenes de lo ocurrido y en ellas se podía observar a Kike Calleja preguntándole a Mikel: «¿Cómo está la familia?». A lo que el hermano de Urdangarin respondió de manera tajante: «No me molestéis».
A pesar de la respuesta, Calleja insistió y volvió a lanzarle una cuestión: «¿Cómo se ha tomado la noticia de la separación de su hermano? Simplemente queremos saber eso». De nuevo, el hermano de Urdangarin contestó de manera escueta: «Es un asunto privado, como sabéis. No tengo nada que decir y no me preguntes». El reportero de 'Sálvame' siguió a Mikel y volvió a preguntarle por Iñaki Urdangarin. Fue en ese instante cuando MikelUrdangarin cogió el micrófono de Kike Calleja con la intención de arrebatárselo, a la vez que, una vez más, hacía la misma petición: «No nos molestéis».