Tres décadas para reconvertir a un gigante dormido como la Cartuja

Desde la finalización de la Expo 92, se ha buscado una reconversión de la Isla de la Cartuja hacia un parque empresarial donde las empresas desarrollaran su labor y expandieran sus actividades, conservando gran parte de los elementos de un evento que transformó la ciudad. Entre medio, ha pasado prácticamente de todo: desde la desaparición de pabellones hasta la implantación de multinacionales que han construido nuevos edificios o han adoptado algunos que se realizaron para la exposición. Desde el monasterio hasta el estadio o Torre Sevilla, tanto la inversión pública como privada se ha fijado en el recinto para instalarse en estas tres décadas y buscar nuevos usos a unos espacios que se han ido adaptando a los nuevos tiempos y circunstancias. Ejemplos como la implantación del nuevo centro europeo de prospectiva, las parcelas adquiridas por el grupo Galia o la reutilización del pabellón de Uruguay son sólo algunos ejemplos de esta actualización del recinto. La avalancha de proyectos presentados por el Ayuntamiento de Sevilla para buscar financiación europea asciende a casi cinco millones de euros y pretenden desarrollar tecnologías en numerosos lugares para facilitar el día a día del parque tecnológico. Desarrollo La Exposición Universal fue un revulsivo para este espacio que estaba separado de la ciudad por las vías del tren y por muros. Ahora, se busca conectarlo aún más a través de la mejora de la accesibilidad a espacios culturales, turísticos y de ocio. Todo ello, para atraer a visitantes y que conozcan elementos como el telecabina, que conectaban la calle Torneo con la Isla. Por otro lado, las posibilidades y las asignaturas pendientes siguen existiendo porque se necesitan mejorar las conexiones de los medios de transporte como los autobuses o la red de cercanías. El consistorio está trabajando en la mejora de las líneas para que los sevillanos y foráneos lleguen a la Cartuja con mayor comodidad . A pesar de ello, todos los días llegan a trabajar al recinto miles de personas accediendo por el estadio Olímpico, el puente del Alamillo, la Barqueta o incluso, la pasarela que conecta Torneo con la parte trasera del monasterio y el Camino de los Descubrimientos. Otros asuntos que se han abierto son los futuros usos del canal de la avenida de los Descubrimientos o el pabellón del futuro, los cuales se encuentran sin uso en la actualidad