La clausura del XX Congreso del Partido Comunista Chino ha ido más allá de lo que los observadores podían esperar de ese magno concilio a mayor gloria del presidente Xi Jinping: la salida del expresidente Hu Jintao del salón de sesiones escoltado por dos ujieres, al parecer por haber escenificado alguna forma de protesta o disconformidad. Como mínimo, ante lo insólito del caso, hay margen para la especulación, en la medida en que los congresos del PCC son maquinarias bien engrasadas con nulo espacio para la crítica o la disidencia. El hecho ha empañado el fin de fiesta congresual y ha hecho perder la cara, en cierto modo, al presidente Xi Jinping, algo escasamente apreciado en los países asiáticos. Hu Jintao pertenece al grupo de dirigentes chinos, junto a su predecesor Jiang Zemin, que se mantuvieron dentro de lo que podemos llamar la dirección colegiada, para evitar la deriva personalista y arbitraria de los tiempos de Mao. Así ocurrió también con el padre de las reformas y la apertura al exterior, Deng Xiaoping , proclive a la discreción y el segundo plano. Xi jinping está, en cambio , instalado en un liderazgo fuerte y personalista, portador de un 'sueño' para la modernización de China, principalmente en los ámbitos tecnológico y militar. Llegó al poder en 2012 con la bandera de la lucha contra la corrupción, que es también una forma de eliminar enemigos políticos, y no esconde las aspiraciones de China al liderazgo global. El nuevo comité central, de 205 miembros, ha sido renovado en profundidad con un 65% de nuevas caras (solo 11 mujeres). Noticia Relacionada estandar Si Hu Jintao, el expresidente de China cuyo legado ha purgado Xi Jinping Pablo M. Díez Además del escarnio de ser expulsado del Congreso del Partido Comunista, sus más estrechos colaboradores han sido condenados por corrupción en los últimos diez años Este domingo conoceremos la composición del Buró Político (25 miembros) y, lo que es más importante, los siete miembros de su Comité Permanente, que es donde verdaderamente reside el poder en China, con Xi Jinping a la cabeza. La agenda que aguarda al presidente está llena de complejidad. Desde su cuestionada gestión de la pandemia hasta la guerra de Ucrania, con su matizado apoyo a Putin , pasando por la espinosa cuestión de Taiwan, Hong Kong y el mar de China Meridional. SOBRE EL AUTOR Juan Leña casas Licenciado en Derecho, ingresó en 1974 en la Carrera Diplomática. Ha estado destinado en las representaciones diplomáticas españolas en los Países Bajos y Japón. En 1993 fue nombrado embajador de España en la República Popular China y, posteriormente, embajador en Japón. En 2003 fue designado Embajador en Misión Especial y en junio de 2004 Embajador de España en Argelia. De septiembre de 2008 a diciembre de 2010 fue embajador de España en Corea del Sur.