Posse quedó en la mira del Gobierno y ya se habla de su reemplazo inmediato
La notable ausencia en el acto del Luna Park, diferencias insalvables con Karina Milei, resoluciones inconsultas y una contradicción sobre la dolarización. Estos y otros motivos que aún no salieron a la luz son algunos de los cortocircuitos internos de la casa Rosada que pusieron al jefe de Gabinete, Nicolás Posse, en la mira y su permanencia en el Gobierno sería muy limitada.
Si bien los allegados a Posse y varios ministros se encargaron de desmentir ante El Cronista que el jefe de Gabinete se encuentre en la cuerda floja y que su salida sea casi un hecho, lo cierto es que el malestar de buena parte de la Casa Rosada con el jefe de ministros creció en las últimas horas.
El detonante más visible para una eventual salida de Posse del Gobierno fue su ausencia notable en el show Javier Milei en el Luna Park para la presentación del libro del Presidente. Pero los que siguen de cerca los pasos del jefe de ministros en las últimas semanas advierten de una tensión permanente que había con Karina Milei y algunos titulares de carteras por las formas en que se maneja Posse.
Negativa y gestos
El vocero presidencial, Manuel Adorni, negó esta mañana los rumores de una salida de Posse y habló de "operaciones externas" al Gobierno. "No es verdad y se suma a tantas otras versiones, como las de Francos, Pettovello y ‘Toto' Caputo", dijo.
Por otra parte, allegados a Posse expresaron a El Cronista que el jefe de Gabinete está "firme en su cargo" y cargaron contra los que "buscan montar operaciones y quieren romper el gobierno".
De hecho, dijeron que Posse lideró esta mañana la reunión habitual de los jueves de Gabinete ante la ausencia de Milei y por la tarde mantuvo un encuentro sobre el "tema trenes" con su equipo en el primer piso de la Casa Rosada.
Aquellos que abonaron la idea de una salida inmediata de Posse sumaron el faltazo al acto en el Luna Park con otros hechos. En concreto, hay datos sueltos que sumados ilustran a un jefe de Gabinete bastante debilitado en estos días en comparación con lo que fue su inicio en el Gobierno donde era el hombre intocable y hermético.
Si bien el informe que Posse dio al Senado la semana pasada superó la prueba de fuego sin sobresaltos, en la Casa Rosada marcaron un dato que al parecer no cayó nada bien al entorno presidencial.
Entre las 1.286 respuestas que dio a los senadores el jefe de Gabinete contradijo el relato del Presidente al sostener que "la dolarización de la economía no está en la agenda económica, pero sí la libre competencia de monedas vigente como fase final para el proceso iniciado en diciembre con el saneamiento de la hoja de balance del Banco Central".
Posse detalló en ese informe al Senado por escrito que el régimen de "competencia de monedas", requiere "un marco macroeconómico disciplinado que incentiva a la autoridad monetaria a mantener la estabilidad del valor del Peso y evitar así la emisión monetaria y consecuente inflación persistente que ha caracterizado a la economía argentina de los últimos veinte años".
El problema es que unas horas después tanto Milei como Caputo habían dicho que la dolarización sigue formando parte del plan del gobierno.
Además, las disputas de Posse con Karina Milei vienen de larga data. La hermana del presidente le endilga al jefe de Gabinete un manejo unilateral de la administración y el dictado de resoluciones internas o designaciones inconsultas con el Presidente.
También hubo quejas en varios ministerios por la demora en que Posse imprime a los proyectos de ley. "Algunos le llaman el despacho para pisar firmas", dijo con ironía un funcionario en relación a los proyectos que caen en Jefatura de Gabinete antes de ser avalados por la Secretaría Legal y Técnica para su publicación en Boletín Oficial.
Por lo pronto, el futuro de Posse está pendiente de una definición de Milei. Su salida no está definida aún. Se mencionó que la eyección se daría después del acto del 25 de mayo en Córdoba. Pero más allá de las fechas quedó en claro que en las últimas horas quedó en una situación de extrema debilidad.