Los gitanos no quieren buenos principios, y hoy la corrida les ha dado la razón. Volvía Juan Ortega a San Isidro, pero todas las miradas fueron a Rüdiger, presente en el callejón y que presenciaba la corrida escoltado entre Nacho y Lucas Vázquez. En un fin de semana de 'No hay billetes', multitud de rostros conocidos se dieron cita en Las Ventas para ver un cartel de máxima expectación. Pero, como siempre se dice, Dios dispone, el hombre propone, pero llega el toro y lo descompone. En este caso, no fue muy boyante la corrida del Puerto de San Lorenzo, protestada en su mayoría. En el ruedo siempre había un toro mirando para toriles. Aplaudía Carlos Herrera a Talavante cuando...
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