¿Cuál es el efecto del agua mineral con limón en los riñones?
Hay quienes reservan en su día unos cítricos y burbujeantes minutos que hacen olvidar al calor con una bebida: esa refrescante agua mineral que puede beneficiar a los riñones, al sistema digestivo y a otras partes del cuerpo. ¿Y es mejor si le agregas jugo de limón? Spoiler: sí, puede serlo.
Quizá tu abuelita te advertía sobre los gaseosos resultados en el estómago de tomar demasiada de esta bebida con gas en tu vida cotidiana, pero el hábito de exprimir limón en un vaso de agua mineral (así, sin azúcar ni nada más) es una alternativa saludable al refresco, en especial cuando más se antojan las burbujeantes bebidas azucaradas en tiempos de calor.
Es posible que te encuentres frente a varias opciones de agua de este estilo, a grandes rasgos, hay:
- Agua con gas: agua simple a la que se le añade dióxido de carbono para carbonatarla, es decir, para conseguir esas burbujas.
- Agua mineral: tiene gas natural porque vienen de un manantial mineral, tiene minerales como magnesio y calcio.
Beneficios: ¿Qué pasa en los riñones si tomo agua mineral con limón?
Tomar un vaso de agua simple con limón sin azúcar es considerado un remedio casero para distintos malestares, incluso se debate sobre si debe tomarse el agua fría o caliente, sin que se haya encontrado alguna diferencia significativa. La versión carbonatada también puede ser parte de esos potenciales beneficios.
En un artículo de salud publicado en The Seattle Times, se explica que un consumo constante de refrescos, en especial los de cola, puede aumentar el riesgo de cálculos renales, lo cual no se ha visto en quienes toman agua con gas.
Según dicho artículo, la carbonatación del agua podría ser incluso algo beneficiosa si tiene jugo de limón, ya que aporta citrato, el cual tiene efectos positivos en los riñones.
El agua mineral con limón tiene beneficios en el estómago, además, ambos ingredientes han mostrado coincidencias en beneficios para los riñones. Considera que no hay estudios concretos de la mezcla, pero hay cosas que sabemos de cada ingrediente.
Ayuda a que tomes más agua
Ambas opciones (tomar agua mineral o agua con limón) aparecen en las recomendaciones de Harvard T.H. Chan School of Public Health para promover el consumo de agua en quienes tienen un paladar muy acostumbrado a las bebidas azucaradas y les cuesta llegar a la ingesta que requiere su cuerpo.
National Institutes of Health (NIH) dice que para mantener sanos los riñones una clave es una ingesta saludable de líquidos: “Se recomienda beber de 1.5 a 2 litros de agua al día. El agua ayuda a eliminar el sodio y las toxinas de los riñones. También reduce el riesgo de enfermedad renal crónica”.
Agua mineral y limón tienen propiedades para prevenir cálculos renales
Los cálculos renales son depósitos duros de minerales que se forman dentro de los riñones, explica Mayo Clinic, se producen cuando se acumulan sustancias que forman cristales (calcio, oxalato y ácido úrico).
Hay varias razones por las que el agua mineral con limón puede ayudar a su prevención:
- Una mala hidratación puede propiciar cálculos renales, por ello, durante los meses calurosos es más probable que aparezcan, así que esta bebida incentiva mantener un consumo saludable de líquidos.
- En general, beber más agua ayuda a evitar la formación de cálculos renales.
- El consumo diario de agua con gas podría prevenir las ‘piedras’ por el contenido en bicarbonato, el aumento de la carga alcalina y del pH urinario, los cuales evitan la acumulación de oxalatos de calcio, según un estudio australiano, citado por El País (Is drinking sparkling water a healthy alternative?).
- “A largo plazo, el agua rica en calcio, magnesio y bicarbonato es ventajosa en este sentido. Por ello, conviene leer atentamente las etiquetas de las botellas”, dice El País.
- El citrato del limón aumenta el volumen y pH de la orina, dice Healthline, por lo que hace menos favorable la formación de cálculos.
- El jugo de limón y lima puede ayudar en especial contra los cálculos de calcio y ácido úrico, los cuales se hacen cálculos en entornos ácidos, dice el urólogo Smita De en Cleveland Clinic.
¿Qué agua mineral es buena para los riñones?
Para tomar más agua, Harvard aconseja exprimir un limón en un vaso de agua con gas y para dar más sabor añadir rodajas de cítricos o hierbas frescas como la menta. Esto ayuda si el agua simple no es atractiva.
Sin embargo, en un artículo de The Conversation, las especialistas Nicola Innes y Suzanne Zaremba aconsejan como primera opción siempre el agua simple, ya que no tiene los potenciales efectos secundarios del exceso de su versión con gas (dañar el esmalte dental, inflamación, eructos y gases):
“(El agua simple) es una opción sana y barata para saciar la sed en cualquier momento. No tiene calorías, es gratis y no contiene azúcares que puedan dañar los dientes, a diferencia de bebidas deportivas, energéticas y carbonatadas que inundan las estanterías de los supermercados”.
Sin embargo, las expertas hacen un apunte: dejar las bebidas azucaradas como el refresco (que se asocian a daños en los riñones) y tomar en su lugar agua con gas es “un paso en la dirección correcta”: “La mayoría de las aguas con gas no contienen azúcares añadidos, aunque algunas sí, así que lea siempre la etiqueta”.
En tanto tomemos simple agua gasificada (mineral o con gas a presión), Cleveland Clinic considera que es una bebida saludable.
Cleveland también reitera que no todas las aguas son gas son iguales y recomienda evitar las que contienen saborizantes, aromatizantes, conservadores, azúcar, edulcorantes y otros ingredientes con potenciales efectos secundarios. Dicho sitio aconseja moderar el agua gasificada a quienes tienen una dieta baja en sodio.
Efectos secundarios: ¿El agua mineral causa problemas renales?
Según la Asociación Española de Urología (AEU), no hay evidencias científicas donde se señale que la mineralización del agua mineral causa cálculos renales o daño renal.
El País explica que algunos estudios indican que el consumo de bebidas carbonatadas (incluida el agua con gas) “aumenta el riesgo de incontinencia de esfuerzo o vejiga hiperactiva en mujeres mayores de 40 años”. Sin embargo, no hay nada concluyente.
Un artículo de la revista Health destaca que la idea de que el agua carbonatada causa cálculos renales es por su contenido mineral, pero este varía y “hace que sea difícil hacer afirmaciones radicales sobre cómo todas las bebidas de agua con gas podrían afectar el riesgo”.
Dicha publicación agrega que entre el contenido a observar está el bicarbonato de sodio que se usa para hacer burbujas, ya que un alto contenido de sodio podría aumentar las posibilidades de padecer cálculos renales:
“Es poco probable que tomar un vaso de agua con gas aumente demasiado los niveles de sodio, pero beber varios vasos al día, en teoría, sí podría hacerlo”.