El delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, ha calificado este martes de «proporcionada» y correcta la actuación policial llevada a cabo en la noche del pasado lunes cuando se procedió al desalojo de una veintena de acampados pro Palestina del interior del Decanato de la Universidad de Sevilla después de que se introdujeran en el edifico. Según Fernández, la actuación fue «proporcionada y correcta». En este sentido, el delegado del Gobierno ha explicado que se habla de heridas (en relación al joven que se cortó un brazo y requirió asistencia hospitalaria) pero ha matizado que esas heridas no se produjeron por la actuación de la policía sino por la rotura de una puerta que llevó a cabo uno de los miembros de la acampada que se resistió al desalojo. En cualquier caso aclaró que tiene «heridas leves» que se produjeron cuando se cerró la puerta y se rompieron los cristales. «No ha habido heridos ni detenidos, solamente identificados», ha dicho Fernández insistiendo en que la actuación llevada a cabo en el decanato de Filología se hizo tras una petición expresa de la Universidad porque «se estaba impidiendo el desarrollo de la actividad universitaria que se lleva cabo dentro del edificio». El desalojo ha provocado una gran polémica y la reacción de un buen número de profesores de la Universidad de Sevilla que este martes han leído un manifiesto en el campus de la calle San Fernando cuestionando los métodos del rector Miguel Ángel Castro. El edificio de la antigua fábrica de tabacos permanece cerrado y blindado por agentes de seguridad privada y varios furgones policiales en el exterior. Este martes se ha pedido el DNI para permitir el acceso a trabajadores y estudiantes. Algunos de ellos tenían exámenes finales ya que el curso está a punto de acabar.