Un parlamentario denuncia que "el olivo marroquí se muere"

Pide que se autoricen regadíos para que los árboles no terminen convertidos en leña a precio tirado

El olivo marroquí se muere y terminará destinado a leña a un precio tirado, sobre todo en la provincia de de Kelaa de Sraghna.

El representante del Partido Istiqlal, Ayachi Al-Farfar, en la Cámara de Representantes, formuló una pregunta al ministro de Agricultura. El parlamentario reveló que “ante la persistencia de la sequía por cuarto año consecutivo en la citada región , que es la que ha registrado las menores precipitaciones en el país en los últimos años, se han producido muertes y pérdidas de miles de olivos”.

Al-Farfar explicó que ante esta situación prevalece un estado de ansiedad entre los agricultores de la región, sobre todo porque sólo se benefician los comerciantes de madera y los propietarios de baños, ya que el precio de un kilogramo de madera del olivo no supera los 0,30 dirhams por kilogramo.

Subrayó que los olivos que costaron al tesoro estatal miles de millones de dirhams en el Plan Marruecos Verde están muriendo, lo que constituye una pérdida enorme, además de que se construyeron represas para los agricultores en tiempos de dificultades. El parlamentario preguntó al ministro sobre las medidas urgentes a adoptar, incluso autorizando uno o dos ciclos de riego mediante canales de agua, con el objetivo de ayudar a los agricultores de la región que se vieron muy afectados por ello.