Maritza Jiménez califica de ‘persecución política’ su destitución de Junta Directiva de CCSS
Maritza Jiménez Aguilar informó de que fue notificada de su destitución este lunes. La decisión se tomó por su aprobación, en diciembre de 2022, de la ejecución del aumento salarial retroactivo en la CCSS.
Maritza Jiménez Aguilar calificó de “persecución política” la decisión del Consejo de Gobierno de destituirla de la Junta Directiva de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), en la que fungía como representante de las asociaciones solidaristas.
Jiménez fue notificada de la separación este 24 de junio y, según informó, la causa fue la aprobación, en setiembre de 2022, de que se ejecutara el aumento en las remuneraciones para el personal de la CCSS de forma retroactiva desde enero de 2020, por montos entre ¢7.500 y ¢8.500 mensuales a la base salarial de más de 63.000 funcionarios.
“Ese aumento se había aprobado dos años antes de la pandemia y se congeló mientras duró esa crisis sanitaria; había sido aprobado por el presidente Rodrigo Chaves cuando fungía como ministro de Hacienda. Él fue parte de los responsables de aprobar dicho aumento salarial”, indicó la ahora exdirectiva este martes en conversación con La Nación.
Por aprobar el pago del aumento, a ella y a los directivos Martha Rodríguez y José Luis Loría, representantes del sindicalismo y las cooperativas, respectivamente, se les abrió un procedimiento administrativo por presunto conflicto de interés y fueron separados de sus cargos.
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Sin embargo, en julio del 2023, los tres representantes fueron reinstalados en sus cargos por orden de la Sala Constitucional que declaró con lugar recursos de amparo.
‘Cobros políticos’ por decisiones
La destitución de Jiménez Aguilar llega pocos días después que José Luis Loría presentara su renuncia a la Junta Directiva.
Para la exrepresentante del solidarismo, a ella y a otros directivos les están cobrando decisiones políticamente.
“Así es, esto es un asunto viejo. Cuando aprobamos la ejecución de ese aumento, porque era ejecutarlo, ya había sido aprobado, se nos dijo que debíamos echar atrás el aumento y ahí empezó la persecución, acusaciones en conferencia de prensa, este proceso y ahora la resolución”, indicó.
Para ella, lo grave de su salida es lo que llamó “una evidente manipulación” de las representaciones de organizaciones gremiales en el máximo órgano de la CCSS para, según dijo, colocar fichas afines al gobierno.
(*) Noticia en desarrollo.