Expresidente de Honduras conocerá su condena por narcotráfico este miércoles
Nueva York. Tres meses y medio después de ser declarado culpable de tráfico de drogas y armas, está previsto que el expresidente de Honduras Juan Orlando Hernández conozca su condena este miércoles.
Un jurado popular lo declaró culpable el 8 de marzo por tres cargos de tráfico de drogas y armas. Estos cargos podrían suponerle una condena perpetua, similar a otros inculpados en la misma causa, entre ellos su hermano Tony Hernández y el colaborador cercano Geovanny Fuentes.
En una audiencia programada para el miércoles a las 11:00 a. m. (3:00 p. m.), el juez Kevin Castel tiene previsto anunciar la pena.
En un intento por evitar la condena perpetua, el abogado defensor, Renato Stabile, argumentó en los documentos de sentencia enviados al juez el viernes 21 de junio que la condena mínima prevista por la ley —10 años por narcotráfico y 30 por armas— “satisfará los objetivos de la sentencia” y solicitó que el juez no imponga “una pena adicional”.
No obstante, esa sentencia mínima dejaría prácticamente al expresidente, de 55 años, el resto de su vida entre rejas en una cárcel de máxima seguridad en Estados Unidos.
Juez rechaza aplazar anuncio de sentencia en caso contra expresidente de Honduras
Stabile recordó al juez que su defendido siempre reivindicó su “inocencia”, alegando que fue condenado “erróneamente” basándose en la “palabra de narcotraficantes y asesinos hondureños —los mismos que combatió— que buscan venganza y salir de la cárcel”.
Aseguró que su defendido “apelará su condena por todos los medios legales” y que “nunca se rendirá”.
En la misma causa, están coacusados el exjefe de la policía hondureña Juan Carlos Bonilla, conocido como “El Tigre”, y el policía Mauricio Hernández Pineda, quienes se declararon culpables de narcotráfico, evitando así sentarse en el banquillo junto al exmandatario.
‘Soy inocente’
“Soy inocente, no culpable”, clama Hernández en un documento de 159 páginas enviado al juez Castel la semana pasada. En este texto, detalla las leyes que promovió y su colaboración con el gobierno estadounidense para combatir el crimen organizado y la violencia de las pandillas, que cobraron la vida de casi 88.000 personas, convirtiendo a Honduras en uno de los países más peligrosos del mundo.
“Me acusaron y condenaron injusta e incorrectamente”, asegura el hombre que desde 2014 a 2022, durante dos mandatos consecutivos, dirigió los destinos de Honduras.
Lamenta que la investigación y el juicio en su contra están “llenos de errores e injusticias”. “La fiscalía y los agentes no actuaron con la diligencia debida en la investigación para conocer toda la verdad”, sostiene.
En la misiva, acusa tanto a las autoridades que le precedieron como a los agentes del Departamento de Lucha contra la Droga estadounidense (DEA) de “no hacer lo que debían haber hecho” para enfrentar la violencia del crimen organizado.
También recuerda que su gobierno “colaboró y coordinó” la lucha contra el narcotráfico con “diferentes instituciones y agencias del gobierno estadounidense” y fue recibido en la Casa Blanca por los presidentes de turno.
Fiel colaborador del gobierno del republicano Donald Trump (2017-2021), llegó a jactarse de los elogios de Washington por la labor de su gobierno en la lucha contra el narcotráfico.
Pero la fiscalía neoyorquina lo acusó de crear un “narco-estado” y de convertir a Honduras en una “súper autopista” por la que pasaba buena parte de la droga procedente de Colombia.
Capturan a socio de Juan Orlando Hernández por narcotráfico en Honduras
Dinero del Chapo
Entre 2004 y 2022 -desde sus cargos de diputado, presidente del Congreso y luego presidente de la República-, Hernández participó y protegió a una red que envió más de 500 toneladas de cocaína a Estados Unidos, según la acusación.
A cambio, habría recibido millones de dólares de los cárteles de la droga, entre ellos del narcotraficante mexicano Joaquín “Chapo” Guzmán, condenado a cadena perpetua en Estados Unidos.
Extraditado en abril de 2022 a Estados Unidos, tres meses después de entregar la presidencia a su sucesora, la izquierdista Xiomara Castro, Hernández habría sido el autor de la famosa frase: “le vamos a meter la droga a los gringos en sus narices y no se van a dar ni cuenta”, según un testigo en un juicio.
Desde 2014, medio centenar de hondureños acusados de narcotráfico fueron extraditados o se entregaron voluntariamente a la justicia de Estados Unidos.