Una ruta por los castillos de Jaén que no debes perderte este verano
Jaén ha sido escenario de contiendas muy importantes para el devenir de la historia de España. Además, por su situación geográfica, Jaén jugó un papel fundamental en el avance cristiano en el sur de la península ibérica durante el siglo XIII. Para ello, resultó fundamental defender las fronteras desde los distintos castillos que se repartían por Jaén. Desde su reconquista a manos de Fernando III en 1246 hasta la caída del reino nazarí de Granada, la provincia jienense fue un lugar con una fuerte presencia militar. Este pasado bélico explica, en parte, la alta densidad de fortificaciones que existe en la provincia jienense. Muchas de ellas, además, fueron edificadas bajo dominio musulmán. Por esta razón, te proponemos una ruta por los castillos de Jaén más impresionantes . Jaén es el territorio con mayor concentración de castillos y fortalezas de Europa. Su localización estratégica propició que aquí se desarrollaran dos de las batallas más significativas de España. Las Navas de Tolosa , en 1212, precipitó la pérdida de la hegemonía musulmana en la península ibérica. Por su parte, la batalla de Bailén en 1808 fue la primera derrota del ejército napoleónico a campo abierto y supuso el principio del fin de la invasión francesa en España. Sin duda alguna, la extensa red de castillos que posee Jaén permitió llevar a cabo con éxito estas empresas militares. Las distintas fortalezas permitían el control de las fronteras con el reino nazarí de Granada , así como del propio territorio. Además, los efectivos militares podían repartirse mucho mejor para dar respuesta a cualquier tipo de ataque. Sea como fuere, esta ruta por los castillos de Jaén es una oportunidad para revivir el pasado de una tierra en la que se libró buena parte del desarrollo histórico de España. La ruta de los castillos de Jaén es una propuesta turística y cultural que permite recorrer la parte occidental de la provincia de norte a sur . En algunas de estas fortalezas se realizan recreaciones y visitas teatralizadas que te permitirán meterte de lleno en las aventuras y rememorar aquellas batallas tan señaladas. Además, cabe destacar que con la ruta de los castillos de Jaén podrás descubrir unos paisajes de extraordinaria belleza. A las afueras de Santa Elena, junto al Parque Natural de Despeñaperros , se ubica el Museo de la batalla de Las Navas de Tolosa. Aunque no es un castillo propiamente dicho, es una parada imprescindible en la ruta de los castillos de Jaén . En este centro podrás descubrir de forma original y didáctica cómo se desarrolló el enfrentamiento que se produjo en julio de 1212 entre los reyes cristianos y el califa de Al-Ándalus. Los hechos históricos se narran a través de herramientas audiovisuales, escenografías y reproducciones de armas e indumentarias. Completa la visita al Museo de la batalla de Las Navas de Tolosa con un paseo a caballo por el Parque Natural o recorriendo sus senderos hasta llegar a la calzada romana del Empedraillo. También destacan el santuario ibérico de la cueva de los Muñecos , la cascada de La Cimbarra, el urbanismo ilustrado de La Carolina o el poblado minero de El Centenillo. Edificado bajo el dominio musulmán, el de Burgalimar es el castillo más antiguo de España –y segundo de Europa– y constituye uno de los máximos ejemplos de la arquitectura militar islámica. Su impronta paisajística lo convierte en una de las fortalezas más sorprendentes del mundo y, además, le ha servido para ser escenario del rodaje de la película El Capitán Trueno y el Santo Grial . En su interior se han hallado restos arqueológicos pertenecientes a asentamientos humanos de la Edad del Cobre. Para completar la visita al castillo de Burgalimar, te recomendamos el camarín del Cristo del Llano , una joya del barroco jienense, y el yacimiento arqueológico de Peñalosa, junto al embalse del Rumblar. La primera derrota de Napoléon Bonaparte en campo abierto se dio en tierras jienenses. La batalla de Bailén se produjo en julio de 1808 y en este museo podrás descubrir los acontecimientos que dieron lugar a la Guerra de la Independencia, las características de los beligerantes, cómo llegaron las tropas napoleónicas por el puente del Rumblar y las consecuencias de la victoria española en esta batalla . No te pierdas el edificio que alberga el museo, cuya estructura recuerda a un cañón , principal pieza de artillería usada en la contienda. Para completar la visita al Museo de la batalla de Bailén te recomendamos visitar alguna almazara de esta localidad y degustar el principal ingrediente de la dieta mediterránea, el aceite de oliva virgen extra . El de Arjonilla es uno de los castillos de Jaén que fueron edificados bajo dominación musulmana. No obstante, sufrió una remodelación en el siglo XIII a manos de los monjes calatravos. Debe su nombre a la leyenda del trovador Macías y su amada Doña Elvira , cuya historia inspiró a Lope de Vega y, siglos después, a Mariano José de Larra. Completa tu visita en el Museo de la Cerámica de Arjonilla , para conocer esta tradición tan singular, y endulza la ruta en la fábrica de dulces y mantecados. El castillo de Santa Catalina se ubica en la zona más alta de Jaén, sobre el cerro en el que se asienta la ciudad. Tras la conquista cristiana en 1246, la fortaleza sufrió diversas modificaciones de las que ahora se diferencian tres espacios: el castillo de Abrehuy, el Alcázar Viejo y el Alcázar Nuevo. El Parador Nacional se ubica en las dos primeras fortalezas, mientras que el Alcázar Nuevo mantiene en gran medida su estructura original . Desde este enclave, que fue centro de operaciones de las tropas napoleónicas, se pueden observar unas increíbles vistas de Jaén y su catedral. Tras la visita al castillo de Santa Catalina, te recomendamos ir a los Baños Árabes . Tampoco te pierdas los tesoros que esconde la catedral de Jaén y la importante muestra de escultura ibérica que alberga el Museo Provincial. La Orden Militar de Calatrava construyó este castillo en Lopera sobre los restos de una antigua fortaleza musulmana. Destaca en la silueta de la localidad jinenese por sus grandes dimensiones. Posee un núcleo principal con dos torres de homenaje, así como un amplio patio de armas y los restos de lo que fue una capilla gótica de los militares calatravos. Es el principal monumento de Lopera y uno de los más importantes de la ruta de los castillos de Jaén. Para completar la visita al castillo de Lopera, te animamos a visitar las trincheras que se conservan de una de las batallas más importantes de la Guerra Civil española. La torre de Boabdil es el vestigio que se conserva del antiguo alcázar que los musulmanes edificaron en Porcuna y que, posteriormente, estuvo bajo el control de la Orden de Calatrava. Se trata, por tanto, de una antigua torre de homenaje de planta ochavada que cuenta con una altura de 28 metros. Recibe este nombre porque, según la leyenda, en su interior estuvo preso el rey Boabdil en 1483 tras la derrota de la batalla de Lucena hasta claudicar ante los Reyes Católicos. Para completar la visita a la torre de Boabdil, te aconsejamos disfrutar de los restos arqueológicos de Cerrillo Blanco, la Casa de Piedra o el Museo Arqueológico Municipal. Además, la parroquia de Porcuna contiene pinturas murales de Julio Romero de Torres que no puedes perderte. El castillo de Alcaudete ha recuperado todo su esplendor gracias a su última restauración. Su centro de interpretación analiza la evolución histórica del edificio y se centra en la etapa en la que la fortaleza estuvo ocupada por la Orden de Calatrava. Estos guerreros situaron aquí el bastión más importante de la frontera y la punta de lanza del avance cristiano frente a los musulmanes de Granada. Tras su vinculación calatrava, el castillo se reformó para convertirse en un palacio renacentista propiedad de los condes de Alcaudete. Para completar la visita, te recomendamos que consultes la disponibilidad de los almuerzos o cenas medievales en las caballerizas del castillo . También puedes visitar la fábrica de dulces de Alcaudete o realizar ciclismo y/o senderismo por la Vía Verde del Aceite. Situado a más de 1.000 metros de altitud, La Mota se divisa en el horizonte de Alcalá la Real como uno de los complejos defensivos más complejos de Al-Ándalus . Tras la conquista cristiana, se convirtió en uno de los centros culturales y de poder más importantes de la zona. Al abrigo de la fortaleza de La Mota se edificaron la Alcazaba, la iglesia mayor abacial y un entramado de calles, barrios, palacetes y bodegas. Para completar la visita a la fortaleza de La Mota, te recomendamos que aproveches tu paso por Alcalá la Real para visitar el Pilar de los Álamos, el Palacio Abacial o la exposición permanente que se ubica en el Palacete de las Hilanderas. También es recomendable ir a la única fábrica de cerveza artesanal de la provincia . Aquí encontrarás más información sobre la ruta de los castillos de Jaén . Además, dispones de un directorio de oficinas de información turística, guías turísticos, alojamientos, restaurantes y otros servicios.