La segunda jugada polémica anoche en el
Alemania-Dinamarca llegó apenas instantes después del gol anulado por el fuera de juego semiautomático. Y tuvo también a Andersen como protagonista. El internacional danés llegó a definir después del choque, en la zona mixta, que es una "auténtica locura" considerar mano esta acción. El balón golpea en las manos del futbolista tras un centro de Raum. Desde la sala VAR, y tras ser revisada, decretaron los once metros que permitieron que Havertz adelantara a la selección germana.
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