Podría ser una alianza histórica, inédita. Un pacto entre el PPdeG, el PSdeG y el BNG para apartar al polémico Gonzalo Pérez Jácome de la Alcaldía de Orense. Pero esa posibilidad parece cada vez más lejos. Se va enfriando, entre variadas exigencias, vetos, líneas rojas y mensajes cruzados enviados a través de la prensa entre las agrupaciones locales de los tres principales partidos de Galicia. La opción de una moción de censura que tumbe a Jácome para recuperar cierta normalidad institucional en el ayuntamiento orensano está cada vez más lejos. Los socialistas habían convocado a populares y nacionalistas a una nueva reunión para este jueves, pero los populares ya han anunciado este miércoles que no pensaban sentarse a la mesa. La razones las ha expuesto la portavoz del PPdeG en Orense, Noelia Pérez, en una rueda de prensa. Básicamente, «la línea roja» que quieren imponer los nacionalistas: el Bloque exige que el próximo alcalde orensano sea un socialista. A los populares les indigna que, desde el minuto cero, los nacionalistas quieran establecer esta exigencias cuando en las elecciones municipales de 2023 el BNG fue la cuarta fuerza política (4 concejales), mientras que el PPdeG, con 7 ediles, solo quedó por detrás de la Democracia Orensana de Jácome (10 concejales), y por delante de los socialistas, que solo pescaron 6 ediles en las urnas. O se levantan las «líneas rojas» del partido menos votado, resumió Noelia Pérez en referencia al BNG, o los populares no participarán más en ese «circo». Pero esas exigencias del BNG no es el único motivo que expone el PP orensano para, al menos de momento, no volver a sentarse a la mesa con socialistas y nacionalistas. A los populares tampoco han gustado las «prisas» de la portavoz del PSdeG, Natalia González, de nombrarse «ella misma» candidata a suceder a Jácome «sin tener si quiera una conversación previa» con el PP, que le supera en votos y ediles. Y sin cuyo apoyo, por supuesto, la moción de censura no sería artiméticamente posible. Con el agravante de que Natalia González ni siquiera había sido la cabeza de lista en las elecciones municipales de 2023, sino que lo fue Francisco Rodríguez, que «lleva casi un año sin asistir a los plenos» municipales. «No vamos a aceptar chantajes de nadie. No vamos a asistir y no vamos a seguir participando en este circo mientras que, por parte de uno y de otro, no nos digan a qué están jugando exactamente«, argumentó en una rueda de prensa la portavoz de los populares en Orense. Los populares orensanos reprochan también al PSdeG que les convocasen a la reunión de este jueves con apenas 24 horas de antelación, con prisas para «cerrar la negociación». Y sospechan, según dijo Noelia Pérez a la prensa, que el PSOE y el BNG estén «manteniendo reuniones paralelas», sin informar ni contar con los populares. Pese a toda esta ristra de vetos y agravios expuesta, el PP orensano asegura que no están «cerrando ninguna puerta» de forma definitiva. Pero piden «seriedad y coherencia» al PSOE y al BNG, advirtiéndoles de que no pueden pretender hablar «de sillas antes de compromisos»; es decir, pactar los nombres del equipo que tomaría el relevo de Jácome antes de decidir qué políticas va a aplicar durante los tres años que quedarían de mandato. Para los socialistas, todos los supuestos agravios esgrimidos por los populares son simples excusas. «Nosotros fuimos muy claros desde el primer momento, mientras el PP lo único que hizo, al igual que en el mandato pasado, fue poner excusas constantemente; excusas que, por cierto, se parecen mucho a esas líneas rojas de las que se quejan«, explicaron a Europa Press fuentes del PSOE orensano. El PSOE recuerda también que si Jácome fue proclamado alcalde en 2019 fue porque se lo facilitó el PP, ya que Democracia Orensana había sido tercera fuerza en unos comicios que habían ganado los socialistas, pero sin el músculo suficiente para gobernar. En resumen, para el PSOE, este plantón de los populares augura que, «conociendo al PP, volverán a salir al rescate de Jácome». «No tardaremos mucho en verlo», pronostican. Por su parte, desde el BNG, señalados por el PP por querer imponer a un alcalde socialista, su portavoz nacionalista local, Luis Seara, consideró probado que estos movimientos del PP confirman que todo lo que han hecho hasta ahora fue «un paripé».