Qué opinan los 18 gobernadores pactistas sobre Milei y el transfondo de por qué volvió Macri al país
El Presidente llegaba último a la provincia norteña para la firma del Pacto de Mayo. En tanto, los mandatarios provinciales dialogaban sobre la próxima etapa del Gobierno y el Presidente del PRO viajaba con una comitiva especial. Los motivos de la ausencia de la Vicepresidenta.
El Hotel Sheraton funcionaba como punto neurálgico de la rosca política en San Miguel de Tucumán, en donde se desarrollará el Pacto de Mayo, que abarca diez acuerdos básicos de largo plazo al que ya se comprometieron a firmar 18 gobernadores. Los últimos mandatarios en llegar fueron Jorge Macri (CABA), Ignacio Torres (Chubut) y Rogelio Frigerio (Entre Ríos).
Los demás se encontraban cenando mancomunadamente en el entrepiso del complejo hotelero. "Acuerdo", "largo plazo" y "expectativa" eran algunas de las consignas que desprendían los demás jefes provinciales en entrevistas públicas, aunque en privado varios remarcaban que ya le habían dado al presidente Javier Milei sus herramientas de gestión como el DNU, la Ley Bases y el paquete de Medidas Fiscales.
No faltaron en las charlas las promesas de "obras públicas" que Nación les hizo a diferentes provincias. Uno de los gobernadores fundamentales de la ceremonia comentaba -esperanzado- ante El Cronista, que el Gobierno se comprometió a financiarle el 70% de la obra pública que había quedado estancada. "Hay que apoyar el sendero de cambios que propone Javier", reiteró, casi como un oficialista más.
Desde el Gobierno confirmaron que estarán 18 mandatarios provinciales. Cupo completo de parte de los integrantes de Juntos por el Cambio y de los aliados provinciales a excepción de uno: el santafesino Claudio Vidal, que en los últimos días comenzó a bajarse del acto por diferentes medidas del Gobierno que, alega, afectaron a su provincia, como el intento de desguace de YCRT, la merma de YPF en la provincia y las concesiones de represas.
Axel Kicillof (Buenos Aires), Ricardo Quintela (La Rioja), Gustavo Melella (Tierra del Fuego), Gildo Insfrán (Formosa) y Sergio Ziliotto (La Pampa) fueron los otros cinco ausentes.
Mauricio Macri es uno de los dos expresidentes que se mostrarán cerca de la firma junto a Adolfo Rodríguez Saá. El presidente del PRO viajaba en un vuelo privado que salió desde Buenos Aires y que tenía como comitiva a su primo Jorge, Frigerio, Torres, y el diputado nacional Martín Yeza. Ese dato no es menor: este último dirigente fue elegido como el titular de la Asamblea Nacional del partido amarillo.
Macri lo mostrará en la Casa Histórica -donde se desarrollará el acto- frente a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich; con quien tuvo una dura confrontación reciente en la nueva elección de autoridades del PRO. Los dirigentes de la funcionaria libertaria se fueron y armaron un escándalo por la predominancia de los alfiles macristas en la estructura partidaria. De ese mismo partido también viajaron los diputados María Eugenia Vidal y Diego Santilli, quien busca ganar consideraciones para con Milei.
El expresidente dio varias vueltas, pero decidió volver de su estadía en Wimbledon para visitar un día el país y firmar el acta. ¿Quién lo convenció? "Seguro que no fue Guillermo Francos. Habrá sido Milei", dice alguien del aparato PRO. Los lazos de Macri con el libertario se explican solo entre ellos: tanto a Karina Milei como a Santiago Caputo, las dos personas de mayor confianza del Presidente, no les gustan esa relación.
Quien anotició que no irá al invite es la vicepresidenta Victoria Villarruel. Lo hizo oficial durante las últimas horas de la tarde, alegando un cuadro viral. "Creo que de verdad está hecha pelota", decía alguien de diálogo casi diario con Milei. Desde el círculo de la titular del Senado se mantenían en reserva durante la jornada de hoy y no confirmaban.
Dicen que hizo lo mejor para ir, pero que el frío polar que habrá en la capital tucumana la hizo decidirse de no ir para no empeorar el cuadro gripal que dice tener. La gran prueba será el desfile militar que se hará este martes, uno de los eventos más esperados por Villarruel, quien tiene un gran vínculo con la familia castrense.
Varios de los gobernadores y diputados presentes reconocían en privado que el acto resultó por su hora. "Espero que no hable de Rothbard y nos podamos ir temprano. Ni él debe tener ganas de venir", dijo un opositor que estará en el Pacto de Mayo.