La pérdida de población es uno de los males endémicos de Sevilla en los últimos años, situando a la ciudad muy lejos de la barrera de los 700.000 habitantes que, según los datos del padrón municipal, llegó a alcanzarse puntualmente a fecha de 1 de enero de 2020 pero que de manera sostenida no se registra desde hace casi una década. En todo este tiempo, los distintos gobiernos municipales han impulsado campañas de empadronamiento y otras políticas concretas para revertir esta sangría poblacional que no han terminado de ofrecer los resultados esperados. Sin embargo, el pasado año se observó un cambio al alza en esta tendencia motivado por el crecimiento del número de extranjeros censados en la capital hispalense, que... Ver Más