Estos son los probióticos recomendados por Boticaria García para prevenir la diarrea del viajero
Cada vez son más los españoles que optan por destinos internacionales en sus vacaciones de verano. Conocer otras culturas puede ser una forma increíblemente enriquecedora de desconectar de la rutina y el trabajo, por lo que conviene tomar precauciones para que algunos problemas de salud comunes, como la diarrea del viajero, no nos estropeen la experiencia.
Qué es la diarrea del viajero
La diarrea del viajero es una de las enfermedades más comunes en los turistas internacionales. Consiste en un cuadro de síntomas principalmente gastrointestinales (normalmente, calambres abdominales, diarreas, náuseas o vómitos, hinchazón y a veces fiebre) causado por distintos microorganismos (muy comúnmente E. coli) y asociado al consumo de agua o alimentos contaminados, muchas veces debido a un pobre sistema de tratamiento del agua.
Suele resolverse por sí sola en un período de tres a cinco días, pero en algunos casos puede prolongarse o incluso derivar en enfermedades más graves, como disentería o cólera.
Las principales estrategias para prevenirla consisten en observar precauciones de higiene alimentaria, como evitar el consumo de agua no embotellada y de alimentos crudos. Cuando aparece, se debe aportar abundante líquido y esperar a que se produzca la recuperación, buscando atención médica siempre que la enfermedad se prolongue en el tiempo o aparezcan síntomas preocupantes (fiebre alta, sangrado, presencia de mucosidad en las heces…).
Los probióticos ideales según Boticaria García
Además de ello, existe cierta evidencia de que el uso de algunos probióticos (productos cuya función es proteger el equilibrio entre las diferentes especies de nuestra flora intestinal) puede reducir el riesgo de padecer diarrea del viajero y otras afecciones como diarrea aguda o diarrea por uso de antibióticos.
Así lo explica la farmacéutica y divulgadora Boticaria García, que destaca a través de su cuenta de la red social Instagram que «las cepas probióticas con mayor evidencia científica y las más recomendadas por las guías nutricionales son Saccharomyces boulardii y Lactobacillus rhamnoss GG«.
También, dice, «es aconsejable que estas dos cepas vayan acompañadas de prebióticos (el alpiste de los probióticos), de vitamina D e incluso de alguna otra cepa probiótica, como Lactobacillus Helveticus y Bifidobacterium longum». Estas fórmulas deben tomarse antes y durante las vacaciones para beneficiarnos al máximo de su efecto protector.