Los médicos de Atención Primaria de la provincia de Alicante están atendiendo a una media de 45 pacientes al día en el arranque del verano con las plantillas mermadas por las vacaciones de los facultativos. En los centros de salud de mayor tamaño están de descanso en torno a un tercio de los profesionales titulares y en los auxiliares hasta la mitad, en el interior pero también en la costa. Esta carga de trabajo obliga a suspender hasta el otoño pruebas como las espirometrías y las de fondo de ojo.