Transferencias bancarias inmediatas: este es el año a partir del cual serán gratuitas
Las comisiones por realizar estas operaciones en España oscilan entre los 0,95 hasta los 12 euros
Según un nuevo reglamento europeo, las entidades bancarias ya no podrán cobrar un extra por las transferencias que lleguen de forma inmediata a sus destinatarios a partir de 2025, algo que, hasta ahora, tenía un coste de entre 0,95 y 12 euros en España.
La norma, aprobada en febrero de 2024 con 599 votos a favor en el Europarlamento, establece que el próximo 9 de febrero las entidades bancarias asentadas en cualquier zona cuya moneda sea el euro tendrán que garantizar la recepción de transferencias en un máximo de 10 segundos desde que el emisor realice la orden. Si no lo han habilitado en febrero, los bancos tienen de plazo hasta el 9 de octubre del próximo año para empezar a emitir transferencias inmediatas.
Por el contrario, si el banco radica en un Estado miembro cuya moneda no es el euro, el plazo se amplía hasta el 9 de enero de 2027 para la recepción de transferencias inmediatas y hasta el 9 de julio del mismo año para el envío cuando estas se realicen en su propia moneda, aunque para las transferencias en euros, el reglamento les amplía el plazo hasta el 9 de junio de 2028. Este es el caso de Bulgaria, Dinamarca, Hungría, República Checa, Rumanía, Suecia y Polonia.
Según un rendimiento realizado por Facua, hasta siete bancos españoles cobran por las transferencias online inmediatas. Estas comisiones van desde los 0,95 euros de Sabadell hasta los 12 euros de Bankinter, pasando por los 6 euros de Santander, el mínimo de 5,94 euros de Caixabank, los 4 euros de Openbank, los 1,50 de Abanca y los 1,25 euros de BBVA.
Lucha contra el fraude
Para garantizar la seguridad de estas transacciones, los proveedores de servicios de pago que operan en la UE deben ofrecer medidas actualizadas de detección y prevención del fraude de forma gratuita para verificar la identidad del destinatario. Además, como salvaguardia adicional contra el fraude, las entidades deberán permitir a sus clientes fijar un importe máximo para las transferencias instantáneas en euros, aunque también permitirán modificarlo antes de una nueva transferencia.
Del mismo modo, los bancos que ofrezcan transferencias instantáneas deberán verificar si alguno de sus clientes está sujeto a sanciones u otras restricciones relacionados con el blanqueo de capitales o la financiación del terrorismo.