Ubicada en la hermosa región del País Vasco, la playa de Saturrarán no solo es un destino de ensueño por sus paisajes idílicos , sino también por albergar el único caserío marino de España . Asimismo, este enclave guarda una fascinante historia de amor entre dos personajes locales, Satur y Aran , cuya leyenda ha sobrevivido a lo largo del tiempo, añadiendo un toque romántico a este fascinante rincón del litoral vasco. La playa de Saturrarán se encuentra en el municipio de Mutriku , en la provincia de Gipuzkoa, al norte de España. Para llegar a este pintoresco destino de poco más de 5.000 habitantes , los visitantes pueden optar por diferentes rutas. Desde Bilbao , se puede tomar la carretera BI-633 hacia Durango y luego continuar por la BI-638 hasta llegar a Mutriku. Desde allí, los que decidan visitar el emplazamiento, deberán seguir las indicaciones hacia la playa . Quienes prefieran hacer uso del transporte público , pueden tomar la línea de autobuses E21 desde Bilbao a Mutriku, con una parada en el centro del municipio, desde donde deben coger el autobús DB03 , ubicado en la Plaza Eulogio Ulacia , que finaliza su recorrido a 700 metros de la playa . La playa de Saturrarán es conocida por su arena fina y dorada , y sus aguas cristalinas, perfectas para el baño y la práctica de deportes acuáticos como el snorkel . Flanqueada por impresionantes acantilados y una vegetación exuberante, esta playa ofrece un refugio ideal para quienes buscan escapar del bullicio urbano. Con una longitud de aproximadamente 300 metros , Saturrarán es lo suficientemente amplia como para disfrutar de un día de playa sin aglomeraciones, incluso en plena temporada alta. El entorno natural de la playa está protegido , lo que garantiza su conservación y permite disfrutar de una biodiversidad única . Además, los visitantes pueden explorar los senderos que bordean la costa y disfrutar de las vistas panorámicas del Mar Cantábrico y de una gran diversidad de especies de aves marinas . Lo que hace a la Playa de Saturrarán verdaderamente especial es la presencia del único caserío marino de España , un edificio histórico que ha resistido el paso del tiempo y las inclemencias del mar y que ha sido fuente de inspiración de relatos y novelas tales como 'Las inquietudes de Shanti Andia' de Pío Baroja o 'Siete Relatos' de José María de Areilza . Además, cuenta la leyenda que en tiempos antiguos, dos jóvenes amantes, Satur y Aran, vivían en la costa vasca. Satur , un valiente pescador , se aventuraba cada día en el mar, mientras Aran esperaba ansiosamente su regreso en tierra firme. Un fatídico día, una tormenta se desató con furia en el mar y Satur no regresó a casa . Aran, angustiada y desolada, comprendió que nunca más volvería a ver a su amado . En su desesperación, Aran maldijo al mar que le había arrebatado a Satur y rogó ser llevada también por sus aguas . Esa misma noche, después de un gran estruendo, Aran desapareció. Sin embargo, en el lugar donde esperó y sufrió la pérdida de su amado, surgieron dos imponentes rocas , conocidas hoy como las rocas de Saturrarán . Estas formaciones naturales se erigen como un eterno monumento al amor y la tragedia de Satur y Aran, recordando a todos los que visitan la playa la poderosa historia de estos amantes.