La serie de Tom y Jerry tenía razón: científico confirma que los gatos son malos cazando ratones
Durante décadas, la serie animada Tom y Jerry ha entretenido con las aventuras de un gato en sus intentos fallidos de atrapar a un ratón. La bibliografía científica sugiere que esta representación no está tan lejos de la realidad: los felinos domésticos podrían ser mucho menos efectivos para cazar roedores de lo que se piensa.
“Cuando los gatos se cruzan con ratas, rara vez intentan cazarlas y, cuando lo hacen, suelen fallar, especialmente si la rata es grande”, indica el biólogo e investigador Eneko Arrondo, en un reciente artículo compartido por The Conversation.
El mito de que los gatos son perseguidores de ratones, según el experto, fue originado en la época medieval, tras la peste negra. Los gatos habrían interrumpido la proliferación de ratas; sin embargo, asegura que tal historia es falsa.
Los gatos no son buenos para cazar ratas
Arrondo ha fundamentado que los gatos no fueron domesticados para cazar ratas. La domesticación de estos felinos sucedió hace 10 mil años, en Oriente Próximo, un lugar donde no había ratas en la región. Mientras tanto, la rata también se habría asociado a entornos humanos durante la misma época, pero ubicadas en el lado opuesto de Asia.
No obstante, el investigador sí menciona que el gato podría haberse relacionado de alguna forma con el ratón doméstico (Mus musculus domesticus) en graneros de la época del Neolítico. Pero, se trata de una hipótesis.
Asimismo, señala que, en una revisión bibliográfica de la dieta de los gatos a nivel mundial, solo el 21% de sus presas cazadas son mamíferos. Dentro de ese pequeño porcentaje están ratones y ratas.
Por otro lado, un equipo de investigadores monitoreó el comportamiento de ratas en presencia de gatos, a partir de colocarles microchips. Los hallazgos, publicados en la revista científica Frontiers in Ecology and Evolution, en 2014, revelaron que “los gatos no son buenos depredadores de ratas”.
De las 100 ratas a las que les colocaron microchips, solo dos murieron en un periodo de 79 días. "Hasta ahora, nadie ha proporcionado buenos datos sobre la cantidad de ratas de la ciudad muertas por los gatos", destaca Michael A. Detusch, coautor del estudio.
Las ratas sí se esconden de los gatos
Fuera de la deficiencia de los gatos para cazar ratas, lo cierto es que los felinos aún son depredadores naturales de los roedores. Pese a que no terminen siendo capturadas, les tienen miedo. Entonces, se esconden. “Su respuesta adaptativa a esta amenaza felina es modificar su comportamiento para coincidir lo menos posible con los gatos, lo que hace que, incluso habiendo el mismo número de ratas, la gente deje de verlas”, explica Arrondo.
Esta tendencia de los roedores de ocultarse de los gatos estaría reforzando la creencia de las personas de que los gatos en las casas ayudan a ‘desaparecer’ la presencia de ratas.
Víctimas de los gatos
Los animales que más son cazados por los gatos son aves, según un estudio científico que ha evaluado la dieta global de los gatos domésticos en libertad, publicado en 2023. Los investigadores identificaron que de las 2.084 especies que son capturadas por los felinos, 981 eran aves, el 47 % del total.
Así también, se halló que 347 de las especies capturadas por gatos han estado catalogadas en la lista de especies amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). "Estos recuentos incluyen el 7,1% de las aves del mundo de interés para la conservación, el 4,9% de los mamíferos y el 2,7% de los reptiles", revela el estudio.