Tras cinco meses de legislatura, el titular de la Xunta, Alfonso Rueda, se reunirá este viernes con el Presidente del Gobierno , Pedro Sánchez. Un esperado encuentro que se ha hecho de rogar, y en el que el mandatario gallego ya ha avanzado que no entrará a negociar la financiación autonómica de forma bilateral , sin ceder en la posición que ha mantenido hasta la fecha: es una cuestión que hay que acordar entre todas las comunidades de forma multilateral. Una postura que la oposición ha criticado con contundencia, alegando que es una decisión «absurda e infantil», una actitud «preocupante» que, según los nacionalistas, demuestra una «subordinación y un servilismo a Madrid que nunca antes se había visto». Reiterando lo dicho hasta la fecha, la líder del BNG, Ana Pontón, criticó este martes que el presidente de la Xunta no acceda a negociar la financiación autonómica con Sánchez por anteponer la estrategia de Génova a los intereses de los gallegos, aseguró. Emplazó así a Rueda a negociar una condonación de la deuda que su partido, indicó, negoció en el pacto de investidura. « Galicia tiene que tener la misma condonación que otras CCAA de su deuda pública«, aseveró, preguntando al mandatario gallego si, en caso de ofrecérsela Sánchez, la aceptaría. «Son cuestiones clave para que no vayamos a otra cita con el Presidente del Gobierno de la que solo quede una foto y no salga absolutamente nada para este país», aseguró. También los socialistas hicieron presión con la esperanza de que, en el encuentro, Rueda ponga encima de la mesa «las preocupaciones de los gallegos» y que « aproveche la cita para hablar de financiación « pese a la postura de su partido a nivel nacional, como recogió Ep. Una postura que el secretario xeral del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, calificó como »un poco absurda« e »infantil«, en declaraciones a los medios este martes en Santiago de Compostela. Asimismo, igual que Ana Pontón, criticó que la Xunta no haya mantenido un encuentro con los líderes de la oposición antes de la reunión con Sánchez, obviando que la convocatoria se hizo de una semana para otra dando al Gobierno gallego muy poco margen de maniobra. Una presión por parte de la oposición ante la que el mandatario gallego no cede, seguro de que la financiación autonómica debe pactarse entre todas la comunidades para mantener la igualdad económica del país. De hecho, los populares gallegos criticaron este martes con contundencia que «el BNG se atreva a dar lecciones de servilismo», recordando que invistieron a Pedro Sánchez «a cambio de nada». Un «acuerdo nefasto» cuyas consecuencias, aseveraron desde el PPdeG en un comunicado difundido a los medios, tienen que pagar los gallegos y gallegas. El ejemplo más reciente, indicaron, no es otro que el de las bonificaciones de los peajes de la AP-9 y de la AP-53, que pactó el BNG con los socialistas y que el ministro de Transportes, Óscar Puente, descartó «hace tan solo unos días». Precisamente, uno de los objetivos del encuentro de este viernes será «corregir cuanto antes los incumplimientos del Gobierno central con Galicia», porque «Sánchez no solo incumple lo pactado con sus socios, sino que incumple las demandas de los gallegos y las gallegas», recoge el documento. La transferencia de la AP-9 y de las competencias de gestión de litoral, el impulso a las conexiones ferroviarias o el apoyo con fondos europeos a los proyectos industriales interesados en crear empleo y riqueza en Galicia serán otros de los temas a abordad en el encuentro. Finalmente, aunque estaba previsto que fuese a las 16:00 horas, se ha adelantado a las 12:30 debido a la ausencia del presidente de la Generalitat de Cataluña , Salvador Illa, de modo que Rueda será el segundo en ser atendido, después de su homólogo vasco, respetando el orden estatuario.