El histórico político del PNV Iñaki Anasagasti no ha querido perderse la manifestación convocada hoy en Bilbao frente al Consulado de Venezuela para pedir la libertad de los presos políticos y de los dos ciudadanos españoles retenidos por el régimen de Nicolás Maduro. Además de tacharlo de «dictadura», ha lanzado potentes mensajes contra la gestión que se está haciendo desde España , monstrandose sorprendido ante la falta de información que está ofreciendo el Ministerio de Asuntos Exteriores. «Una de las argumentaciones que está utilizando Albares, que me parece nefasto como ministro, es que no se puede envenenar la cosa. Yo entiendo que un diplomático tiene que cuidar su lenguaje, pero no se puede hacer la manicura a un tigre» , ha dicho refiriéndose al Ejecutivo liderado por Maduro. «No va a lograr nada acariciando a la fiera. Esto tiene que ser un clamor internacional y tiene que moverse en Europa y Venezuela, no a través de Zapatero, para que tenga una sola voz y pedir que deje en libertad a dos personas que han sido secuestradas», ha añadido. El exsenador español nacido en Venezuela, que se crio y realizó gran parte de su carrera política en el País Vasco, defiende que en el «forcejeo» que está manteniendo Maduro y su cúpula «quieren tener una prenda para presionar al Gobierno español» . Es por eso que conmina a Albares a elevar la voz, si no «aparecerá Zapatero por alguna esquina tratando de salvarles». Para Anasagasti las acusaciones de pertenencia al CNI y de organizar un complot contra los dos bilbaínos son un «cuento de Mortadelo y Filemón», ha afirmado junto a un grupo de venezolanos que protestaban en el centro de Bilbao. «La gente se extraña de que Borrell y Robles hayan dicho que es una dictadura. El problema está en la presión que tiene el PSOE del propio Zapatero , pero es gravísimo lo que está pasando», ha añadido. La manifestación estaba convocada por la comunidad venezolana en un enclave paradigmático de la capital vizcaína. Entre el Consulado de Venezuela, que dirige Glenna Cabello, hermana del ministro del Interior venezolano Diosdado Cabello , quien el sábado pasado anunció el apresamiento de José María Basoa y Andrés Martínez, y la sede de EH Bildu en Bilbao, con quien el PNV mantiene un enfrentamiento desde finales de agosto a cuenta del fraude electoral en Venezuela. La sede consular, cerrada hoy casualmente a la hora de la manifestación pese a que su horario es hasta el mediodía, no ha querido hacer declaraciones ante este periódico. Tampoco en los sucesivos mensajes que ha enviado vía electrónica preguntando por la situación de los dos vascos encarcelados en Caracas. Según ha trascendido en medios, fue Cabello la que recomendó a sus familias que denunciaran a la Ertzaintza la desaparición. Luego esta descubrió su paradero, tal y como informó ABC. En cuanto a EH Bildu, Anasagasti ha querido denunciar la «doble vara de medir» que mantienen en España respecto a las «dictaduras». También Sumar y Podemos. «Lo que ha hecho el PNV no es novedoso. Siempre hemos apoyado la causa de la democracia» , ha afirmado sobre el apoyo que dieron los nacionalistas a la PNL para pedir que el Gobierno reconozca a Edmundo González como presidente electo de Venezuela. «Hay gente que sigue apoyando las dictaduras. Bildu está pidiendo las actas. Me hubiera gustado saber qué pasaría si a Bildu le hacen lo que está haciendo Maduro . Que no se hubiera proclamado la victoria electoral», se ha preguntado retóricamente el veterano político. Conviene recordar las palabras del coordinador general de la izquierda aberzale, Arnaldo Otegi, quien pidió «diálogo» la semana pasada y calificó de «injerencia» el posible reconocimiento de González. Uno que, de forma opuesta, el PP también quiere que se traslade al Parlamento Vasco. El Grupo Parlamentario popular en la Cámara regional ha presentado este miércoles una enmienda a la totalidad a una proposición no de ley sobre la situación en Venezuela del PNV y el PSE (Partido Socialista de Euskadi), exigiendo la liberación de «todos los presos políticos y de los dos ciudadanos vascos», además del reconocimiento por parte del Gobierno de España de la figura de Edmundo González como presidente. «El Parlamento tiene que ser un clamor y debe alzar su voz de manera contundente en defensa de la libertad y la democracia en Venezuela», ha reclamado la portavoz popular en la cámara, Laura Garrido Knörr.