El mal funcionamiento de Cercanía s tiene preocupado al Gobierno de Madrid, que además no desaprovecha la ocasión para cargar contra quienes lo gestionan. Este miércoles, el consejero de Transportes, Jorge Rodrigo, ha entregado al consejo de Gobierno madrileño un informe en el que destaca los 2.440 millones de euros que Metro va a invertir este año -en nuevas instalaciones y material móvil, modernización de otras, ampliación de la red y mantenimiento- y que ha confrontado con los «819 millones que ha invertido el Ministerio de Trabajo en Cercanías en seis años», que asegura que es la cifra oficial que se les ha facilitado. Rodrigo ha destacado que «Cercanías ha perdido un millón de viajeros en un año». De acuerdo con sus datos, hay ya 700 incidencias acumuladas en este servicio de transporte público, que a juicio de Rodrigo «está totalmente abandonado». De ese millón de viajeros que ha perdido, ha subrayado que el 60 por ciento se han pasado al transporte interurbano, un 20 por ciento al Metro y un 20 por ciento al vehículo privado. Rodrigo lamenta que el ministro Óscar Puente «proclamara hace días en sede parlamentaria que el tren vivía el mejor momento», algo que le parece «una frivolidad que no responde a la realidad». Por eso, asegura, como «sabemos que existe un problema, recuerdo que tenemos órganos de coordinación» para afrontarlo y buscar soluciones. Acto seguido, ha vuelto a pedir la reunión de la conferencia sectorial de transportes, y de la comisión de seguimiento del plan de Cercanías de Madrid. Fuentes de Renfe, sin embargo, pusieron en duda la denuncia de la Comunidad de Madrid. Apuntaron datos acumulados de enero a agosto de 2023, y los pusieron en relación con los del mismo periodo de 2024. Lo que se obtiene, señalan, es un incremento de un 4, por ciento del total de viajeros: 148,5 millones en el primer año, y 15,9 en el segundo. Si se comparan sólo los datos del verano, entre julio y agosto, en 2023 se pasó de 19,8 millones en junio a 17,3 en julio y 14,3 en agosto, mientras que en este año 2024, en junio hubo 19,8 millones de viajeros (un 0,3 por ciento menos), en julio 18 millones (un por ciento más) y en agosto 1 millones (un 2,2 por ciento menos que en el mismo mes del año anterior). Todos estos, insisten en Renfe, son datos de viajeros del núcleo de Madrid acumulados. En cuanto a las inversiones en Metro, un servicio de transporte público que utilizan cada día 2,3 millones de viajeros, este año serán 2.440 millones de euros los que se invertirán. El presupuesto para la mejora del servicio y las instalaciones asciende a 1.473 millones, de los cuales 53 se destinan a transformación digital, con la puesta en marcha del Centro de Procesamiento de Datos (CPD) que concentra todas las infraestructuras tecnológicas del suburbano; 33 millones para la renovación de equipamiento y centros de trabajo y 448 millones a la automatización y modernización de vías y túneles. De igual forma, el Plan de Accesibilidad y Modernización de las estaciones contempla 94 millones y la mejora del material móvil acapara 844 millones. Además de esas cantidades, el Gobierno madrileño invertirá cerca de 866 millones de euros para las ampliaciones de la red y de este modo satisfacer las demandas de una población creciente. El presupuesto de la Línea 3 para unir las estaciones de Villaverde Alto (L3) con la de El Casar en Getafe (MetroSur) asciende a 115 millones. Esta actuación está financiada con fondos europeos Next Generation. En cuanto a la prolongación de la L11 es, según Rodrigo, la «obra más ambiciosa de todas las que se están realizando cuyo valor supera los 531 millones de euros». El nuevo tramo entre Plaza Elíptica y Conde de Casal contempla la creación de dos nuevas estaciones, Comillas y Madrid Río, y conexión con Palos de la Frontera, Atocha y Conde de Casal. Asimismo, se avanzará en la remodelación de la L5, que llegará desde Alameda de Osuna hasta las terminales T1-T2-T3 del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, con una inversión superior a los 219 millones. En mantenimiento y conservación de la red, Metro va a invertir 101 millones de euros en 2024. El objetivo, recuerda el consejero, es «prestar un servicio a los madrileños que contribuya a una movilidad fluida, ágil, fiable y frecuente y para que esto sea posible, todas las administraciones tienen que responder a sus compromisos, algo que no sucede con el Gobierno central respecto a la gestión del Cercanías».
