Evo Morales anuncia huelga de hambre para que gobierno de Arce inicie mesas de diálogo por crisis en Bolivia
Evo Morales, líder del Movimiento al Socialismo (MAS), ha tomado la decisión al iniciar una huelga de hambre en un intento por reactivar el diálogo entre su partido y el gobierno de Luis Arce. Este movimiento ocurre en un contexto de agitación social, donde los bloqueos de carreteras han persistido durante 19 días, mientras que un grupo de miliares han sido tomados como rehenes.
En su anuncio, Morales indicó que su decisión busca evitar "hechos de sangre" y llamar la atención sobre las demandas insatisfechas de sus seguidores. Por ello, planteo establecer dos mesas de diálogo: una enfocada en los temas económicos y otra en asuntos políticos. "Es necesario que el gobierno reaccione y entienda que la represión no es la solución", enfatizó.
Evo Morales inicia huelga de hambre
La huelga de hambre de Evo Morales, que comenzó en las instalaciones de la Coordinadora de las Seis Federaciones del Trópico de Cochabamba, se presenta como un acto de presión política en un momento crítico. A medida que el país enfrenta bloqueos de carreteras, el exmandatario ha instado al Pacto de Unidad a considerar un cuarto intermedio en las movilizaciones para evitar un mayor daño a la economía nacional. Durante sus declaraciones, hizo un llamado a sus seguidores a analizar la situación y priorizar el diálogo responsable.
Por otro lado, indicó que la falta de dólares ha restringido las importaciones y creó una crisis económica que afecta a todos los bolivianos. Según sus palabras, es imperativo que el gobierno de Luis Arce instale mesas de diálogo donde se discutan las demandas de los líderes detenidos y otros problemas que han surgido durante las protestas.
La tensión creciente en Bolivia: bloqueos, protestas y crisis económica
La situación actual en Bolivia está marcada por un clima de tensión y descontento. Los bloqueos de carreteras, que han durado casi tres semanas, han sido respuesta a la presión sobre el gobierno de Arce, que se enfrenta a un contexto de violencia creciente. Recientes incidentes en Parotani, donde manifestantes utilizaron dinamitazos contra la policía, han elevado la preocupación por el uso de la fuerza en la gestión de estas movilizaciones. El gobierno ha denunciado asaltos a recintos militares.
La crisis económica también juega un papel crucial en este escenario. La falta de dólares ha limitado las importaciones y creó un desabastecimiento que afecta a diversos sectores.