Al igual que el gran poeta César Vallejo, el Atlético de Madrid (mejor dicho, el del Cholo, algunos aún los distinguimos perfectamente) ha muerto en París con aguacero, un día del cual teníamos ya el recuerdo. El difunto (no el Atleti, que es indestructible) lleva años en la morgue. Aunque acabe de ganar al PSG. Quien escribe estas líneas prefiere expresar sus opiniones, que sustenta desde hace varios años, cuando el equipo gana. Nadie le tildará de oportunista ni mucho menos (¡Dios le libre!) de alegrarse de los males de su equipo. Pese a la agónica e inexplicable victoria ante el PSG (si se miran las estadísticas), se repitieron los defectos habituales, que se antojan inevitables. Fallos continuos en las...
Ver Más
