Era el minuto 84 de partido y
Joselu estaba en frente del punto de penalti para tratar de transformar lo que hubiera sido el 5-0 del
Real Madrid a
Osasuna en aquel partido de la jornada 9 de la Liga pasada. Sin embargo, una buena estirada del meta rojillo,
Sergio Herrera, lo evitó y, acto seguido, este se giró a la grada que había gritado "queremos la manita" y les dedicó un gesto de 'vacile' que no sentó nada bien.
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