El Ayuntamiento de Málaga destina un parque público a un festival privado que ingresará más de cuatro millones de euros
Los vecinos se manifiestan contra el uso privativo durante cinco meses de la mitad del Parque del Oeste por parte del Festival de las Linternas, que pagará 100.000 euros de canon, y el Ayuntamiento lo defiende porque “le viene bien a Málaga”
El Parque del Oeste de Málaga tiene 74.000 metros cuadrados en el muy populoso distrito de Carretera de Cádiz, en Málaga capital. Ofrece pistas deportivas, aparatos para hacer ejercicio, un estanque, un singular zoológico y 21.000 metros cuadrados de zonas verdes “donde los niños y los mayores pueden correr y pasear”, según informa el propio consistorio, titular del espacio. Desde hace algunas semanas, parte de esa oferta ha sido clausurada. Unas vallas cortan el paso a la superficie central y los operarios se afanan incluso por impedir la vista, rodeándola con unos paneles opacos. Casi la mitad del parque está ocupado por coloridas flores, medusas, bolas y colas de dragón, elementos del Festival de las Linternas que se celebrará cada noche, en tres pases diarios, del 30 de noviembre al 15 de febrero, a entre 15 y 20 euros la entrada.
La súbita sustracción para la explotación de un negocio privado de 33.700 metros cuadrados de un parque público muy usado por los vecinos ha generado un malestar que cristalizó el pasado domingo con una concentración a la que acudieron unas 500 personas, según los convocantes. El lema era “Espacio público, sí. Uso privado, no”. “Devolvednos el parque, corrupptos”, se lee en un cartel con el que la empresa anuncia estar preparando “algo mágico”. Una petición en change.org acumula más de 2.100 firmas en cuatro días y se ha convocado una nueva concentración para este domingo.
El Ayuntamiento defiende la iniciativa porque “le viene bien a Málaga”, según ha dicho Teresa Porras, concejala de Fiestas. “Es un sitio que en invierno se usa poco”, aseguró el pasado lunes, provocando las protestas de los vecinos. La polémica por el uso del Parque del Oeste llega después de que se haya consolidado la utilización navideña del Jardín Botánico de la Concepción para un uso similar, algo que ocurre desde 2021.
Tal y como informó Cordópolis, Ximenez anunció el festival el pasado septiembre coincidiendo con la visita de Juan Manuel Moreno, presidente de la Junta de Andalucía, a China, dos meses después de que se abriese el expediente en el ayuntamiento de Málaga.
Ingresos previstos de más de cuatro millones y canon de 100.000
Si las previsiones de Ximenez se cumplen, el Festival de las Linternas, que promete un espectáculo inmersivo “único” con 600 linternas y 4.000 puntos de luz, será un buen negocio. Las entradas han tenido un coste de 14 euros hasta el 22 de noviembre. A partir de hoy pasan a costar entre 15 y 20 euros, con un descuento del 10% para los nacidos o residentes en Málaga. No pagan los niños de hasta tres años. Para los vecinos de la zona, Ximenez anunció “pases especiales” gratuitos antes del estreno (previsto para el 30 de noviembre). Después, tendrán que pagar como todo el mundo.
La empresa, que monta el espectáculo con la china Lantern Group, prevé que unas 250.000 personas acudan a alguno de los cuatro pases diarios del 30 de noviembre al 15 de febrero. Aplicando un precio medio de 18 euros, los ingresos serían de 4,5 millones de euros. Sus promotores aseguran que invertirán unos tres millones.
La cifra contrasta con el canon que se pagará por usar el parque público: 100.000 euros, según asegura el ayuntamiento que, sin embargo, hasta ahora oculta el contrato. No lo ha enviado a este medio, ni tampoco lo ha aportado a la oposición. Con Málaga lo pidió el 30 de octubre. El expediente no aparece en el portal de transparencia.
elDiario.es Andalucía sí ha tenido acceso a la convocatoria con la que se fraguó, firmada por Elisa Pérez de Siles, concejala de Comercio y Vía Pública. Allí se fija el marco general: explotación privativa del espacio público por cinco meses (tres de espectáculo, dos para montaje y desmontaje); naturaleza del espectáculo (relacionado con el Año chino de la Serpiente); motivos del evento (“acercar a nuestros ciudadanos la cultura milenaria china”); y las obligaciones de las partes.
La principal de la concesionaria es pagar un canon, que en la convocatoria se fija en un mínimo de 69.729,30 euros, “conforme la Ordenanza Fiscal nº10”. Se supone que Ximenez, única ofertante, lo subió a 100.000. Consultada la ordenanza, es imposible saber cómo el Ayuntamiento fijó un canon de salida de 69.000 euros.
El artículo 13 establece la tasa para “espectáculos y atracciones” en función de la zona, y fija el precio de ocupación entre 0,4 y 0,73 euros por metro cuadrado y día. Aplicando el más barato, el canon por ocupar 33.700 metros cuadrados sería de 13.480 diarios. Algo más de dos millones por cinco meses. Veinte veces más que lo que supuestamente va a ingresar el consistorio, que no ha respondido a este medio cómo ha hecho el cálculo.
“Han inutilizado el parque”
Este miércoles a mediodía, grupos de trabajadores movían estructuras de plástico de un lado a otro, mientras quienes habitualmente disfrutan del parque daban vueltas alrededor. “Yo vengo todos los días: recojo a mis nietos, y durante una hora damos una vuelta, porque les gusta disfrutar de esto. Y por la tarde vengo aquí con mi mujer hora y media, para mi colesterol alto, en vez de irme al paseo marítimo, que en este tiempo ya hay mucha humedad. Y claro, nos ha fastidiado”, cuenta Rafael López, que acaba de recoger a sus dos nietos del colegio.
“Si es algo para que disfruten todas las personas está muy bien, pero entonces que no cobren, porque es público. Si quieren cobrar, que lo pongan en un salón de actos”, protesta Rafael Aranda, mientras pasea a su perro. “Dejamos de disfrutar todos los ciudadanos por un beneficio privado. No lo veo bien”, observa Juan Manuel Gallardo, que todos los días pasea por aquí con su madre.
El Ayuntamiento esgrime que más del 50% del parque sigue siendo utilizable. Es un parque atravesado por una vía de dos carriles en cada sentido. “Se han quedado con la parte central donde está el estanque, arbolitos, césped. En la parte de arriba, para las personas queda un pasillo de cemento. En la parte de abajo han dejado también un trocito, pero hay que salir a la calle y cruzar vías con bastante tráfico para poder acceder”, denuncia Ángeles, una de las vecinas que está organizando las protestas. “Han inutilizado el parque. Para la gente mayor, colegios, guarderías… Olvídate”.
Hay inquietud por el ruido y el tráfico que generará en la zona (la concejala dijo que se podrá aparcar en el Paseo Marítimo, que “está vacío por la noche”) y también por los animales del pequeño zoológico. Peces, tortugas, aves exóticas, cisnes, gansos, patos e incluso ejemplares de emúes, un ave exótica de origen australiano. La adjudicataria debe adoptar las medidas necesarias para garantizar su bienestar, especialmente “frente al ruido, luces y desplazamiento de personas”. La solución es trasladarlos.
La oposición denuncia un “hurto”
La oposición denuncia un “hurto”. “Es un atropello y un abuso de poder. Tener mayoría absoluta no da derecho a privatizar un espacio público”, denuncia Begoña Medina (PSOE). Nicolás Sguiglia (Con Málaga) cree que el caso muestra “que todo está en venta en la ciudad”. Vox ha denunciado la “opacidad” de la tramitación. Todos los partidos apuntan a la ubicación como principal inconveniente, habiendo lugares infrautilizados, como el Cortijo de Torres.
La oposición también tiene dudas del procedimiento, iniciado por el área de Comercio, a pesar de que el parque está gestionado por Limposam, una empresa pública municipal que, entre otras funciones, concede autorizaciones de uso del parque. Sin embargo, el asunto no pasó por su Consejo de Administración, ni por el consejo de distrito de Carretera de Cádiz, el órgano de participación ciudadana.
El PSOE ha pedido la retirada del espectáculo, argumentando que en la convocatoria se prevé esa posibilidad por razones de “interés social”, entre las cuales estaría el rechazo vecinal. El consistorio ya lo ha descartado. Otra cuestión es lo que pase en años venideros. Nadie sabe si el festival podría repetirse. Ximenez, una potente empresa de iluminación, es también la adjudicataria habitual del espectáculo de luces navideñas del que la concejala de Fiestas saca pecho con frecuencia. Por el último contrato, para las navidades y Carnaval de 2024, 2025 y 2026, el Ayuntamiento le va a pagar 5.079.000 euros, a casi 1,7 millones por año.