La Navidad llega a Málaga y el centro de la ciudad se viste de magia con uno de los espectáculos de luces más espectaculares de España. Miles de personas, tanto malagueños como visitantes de otras provincias, se acercan cada año a la capital para disfrutar de la espectacular iluminación de calle Larios , un auténtico icono que se convierte en el epicentro de la celebración navideña. A ritmo de villancicos, proyecciones, juegos de luces y el trasiego de gente se va creando un ambiente único que contagia de alegría durante todo el mes de diciembre. Pero el encanto navideño no se queda solo en calle Larios. Espacios como la Plaza de la Constitución, el entorno de la Catedral o el Paseo del Parque también brillan con decoraciones que merecen ser admiradas, haciendo que el paseo por el centro se convierta en una experiencia imprescindible en estas fechas. Y como no todo es caminar y admirar, también es importante disfrutar de las maravillas gastronómicas que Málaga tiene para ofrecer. Desde restaurantes tradicionales hasta locales de cocina moderna, la ciudad cuenta con una amplia oferta para hacer de tu visita un plan redondo y de lo más sabroso. Ya sea para un desayuno antes de recorrer las luces, un tapeo rapidito entre calles o una cena tranquila después del espectáculo, aquí te dejamos nuestras mejores recomendaciones para completar tu experiencia navideña en el centro de Málaga. ¡Descúbrelas y déjate conquistar por la magia de estas fechas! Si estás paseando por la Plaza de las Flores y buscas un sitio donde disfrutar de un tapeo con mucho estilo, Kraken es tu lugar. Bajo la batuta del chef Diego René, quien también lidera las cocinas de Beluga, este espacio reinventa la experiencia de comer fuera, combinando lo mejor de una taberna de vinos, un gastrobar y una cervecería en un mismo concepto. Aquí, la carta es tan variada como creativa. Encontrarás tapas frías, calientes, fritas y en formato bocado, pensadas para compartir y disfrutar sin complicaciones. Desde una ensaladilla que promete sorprender hasta opciones vegetarianas, quesos y chacinas, pasando por elaboraciones con un toque más viajero, como el taco de gambón al ajillo, el mollete de steak tartar con yema curada, los rollitos de cordero con yogur de remolacha, o los clásicos pero irresistibles huevos rotos con chistorras a la sidra. La propuesta de Kraken es clara: cocina rica, apetecible y sin pretensiones, perfecta para tapear, picotear y dejarse llevar por los sabores. Un lugar donde lo informal y lo delicioso van de la mano para convertir cada visita en un acierto seguro. Si las luces navideñas del centro de Málaga son un espectáculo imprescindible, La Cosmopolita es el complemento perfecto para esa experiencia. Después de recorrer las calles iluminadas y dejarte llevar por la magia de la Navidad en la ciudad, este «guiso bar» de Dani Carnero te espera a pocos pasos para cerrar la velada con un festín de sabor auténtico. Ubicada en pleno corazón de Málaga, cerca de la emblemática calle Larios, La Cosmopolita lleva casi una década siendo la meca de un peregrinaje para los que buscan una cocina de máxima calidad a un precio accesible. Porque si algo hace Dani Carnero, es precisamente eso: cocinar calidad. Un espacio donde el sabor y el producto mandan y se disfruta de una experiencia honesta y memorable. Sin florituras ni adornos, el sabor y la pasión son los verdaderos protagonistas en este rincón que ya es un clásico de Málaga. A los pies de la Alcazaba y el Teatro Romano, Taberna Uvedoble es un imprescindible para quienes buscan en sabores tradicionales, pero con un giro personal que reinventa sus recuerdos gastronómicos. Su chef, Willie Orellana, ha conseguido que platos de toda la vida luzcan con una personalidad única que ha conquistado a una legión de malagueños y público visitante que encuentra en su carta la oportunidad de disfrutar de la cocina española desde una mirada actual. Entre sus propuestas más demandadas se encuentra su famosa ensaladilla rusa, considerada por muchos una de las mejores de la ciudad. También destacan los fideos negros tostados con calamaritos de Málaga y los originales minikebab de gambas al pilpil, bocados llenos de sabor que no dejan indiferente. Pero no acaba ahí: no puedes irte sin probar el morrillo de pez espada en manteca colorá o su tortilla de patatas trufada al momento. Si estás paseando por el centro y disfrutando del ambiente navideño de la ciudad, con las luces que iluminan la Alcazaba y las calles cercanas, esta taberna es la parada perfecta para redondear el día con platos que unen lo tradicional y lo sorprendente. Entre las calles del centro, un clásico que no falla es Mesón Mariano, un rincón donde la cocina andaluza de siempre se sirve sin artificios, con honestidad y mucho sabor. Fundado en 1988 por Mariano Martín Navas, este establecimiento es todo un referente para quienes buscan la tradición culinaria en su máxima expresión. Entre las especialidades de la casa, destacan tres imprescindibles: el chivo lechal malagueño, preparado con mimo y respeto a la receta clásica; las alcachofas, siempre en su punto, y el bacalao, que nunca decepciona. Platos que, más que comida, son una oda a los sabores auténticos de la provincia. Mesón Mariano es perfecto para hacer un alto en el camino, ya sea antes o después de disfrutar de las luces de Navidad que engalanan el centro. En plena ebullición festiva, este establecimiento es un remanso de tradición y buena cocina, ideal para quienes aprecian lo de toda la vida. Una parada chic en tu ruta de luces navideñas. Ubicada en la calle Santa María, La Medusa es una ostrería malagueña que, desde su apertura en 2014, ha capturado la atención de locales y visitantes gracias a su extensa propuesta de ostras, que se pueden disfrutar de diversos calibres y procedencias, acompañadas de una exquisita selección de vinos, champagnes y cavas. Además de las ostras, en su carta se pueden encontrar platos como las cazuelitas de jibia con garbanzos o las kokotxas de bacalao al pilpil, así como una cuidada selección de quesos, salazones y conservas, que aportan una experiencia gastronómica de calidad en pleno centro de la ciudad. Si estás paseando por el centro de Málaga y te acercas a disfrutar de las luces navideñas, La Medusa es el lugar ideal para una parada refinada y darte un capricho con sabor marinero. En pleno corazón de Málaga, Refectorium Catedral es uno de esos clásicos que nunca pasa de moda. Este restaurante se especializa en una cocina de mercado que honra el recetario tradicional malagueño, sin perder de vista algunos toques más creativos que actualizan su propuesta. Su carta es un verdadero recorrido por lo mejor de la gastronomía local: flamenquín, ensaladilla rusa, pescaíto frito, gambas al pilpil, conchas finas, carnes y mariscos y siempre frescos. Además, puedes saborear platos como el tataki de atún, el chuletón, los huevos rotos Refectorium, las vieiras y los calamares. No pueden faltar las setas a la plancha y un excelente jamón ibérico Joselito. Si paseas por el centro disfrutando de las luces navideñas, Refectorium Catedral es el lugar perfecto para hacer una pausa y saborear lo mejor de la cocina malagueña. Quien se incline por un restaurante de altura, Matiz, ubicado en el hotel Molina Lario, es una parada disfrutona para hacer una pausa tras al bullicio de las calles edl centro. Bajo la dirección del chef Pablo Molina, la cocina de Matiz ofrece una visión moderna y creativa de la gastronomía malagueña. Con un enfoque en la calidad de la materia prima y el respeto por las tradiciones, su cocina se renueva dos veces al año, aprovechando los ingredientes de temporada para sorprender a los comensales con lo mejor de cada estación. Entre sus platos más destacados están la oblea crujiente con tartar de atún rojo, las croquetas de presa ibérica Dehesa de los Monteros con emulsión de manzana verde, y el canelón de chivo malagueño gratinado. Además, el restaurante abre todo el día, desde el desayuno hasta la cena, y cuenta con una coctelería que aporta un toque de glamour a la experiencia gastronómica. El Café de Chinitas, un referente histórico de la Málaga de antaño, revive en la memoria de la ciudad con la misma fuerza que su legado cultural. En sus muros aún resuenan los cantes por malagueñas de figuras como Juan Breva y Antonio Chacón, mientras se siente el eco de los aplausos a grandes artistas como Estrellita Castro, Pastora Pavón, Manolo Caracol, y Juanito Valderrama. Esta emblemática sala también fue testigo de la presencia de grandes intelectuales y artistas, como Federico García Lorca, Picasso, Salvador Dalí o Vicente Aleixandre. Aunque el café cantante cerró sus puertas en 1937, su historia permanece viva en los corazones malagueños, que este año han visto cómo el espíritu del Chinitas regresa la vida en el mismo edificio que lo vio nacer, en el pasaje homónimo, junto a la plaza de la Constitución. Este proyecto no solo es un homenaje a su legado, sino también una nueva etapa para el lugar que durante tantos años fue el epicentro de la música, la cultura y el flamenco de Málaga. Restaurante con encanto en un marco incomparable, en la mítica Calle Beatas y en dos palecetes restaurados de los siglos XVIII y XIX. Con protagonismo para los vinos y con una gran vinacoteca, es indispensable acudir a catas o un maridaje. Croquetas de calamar en su tinta o el ajo blanco malagueño, algunas de las recomendaciones. ¿Un twist japo-peruano antes o después de ver las luces? ¿Por qué no? Con la cocina abierta durante todo el día, Ronda14 es una parada más que tentadora para picar algo antes o después de ver las luces navideñas de Málaga.