El prefecto del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, Kevin J. Farrell , dejó a un lado las consideraciones teológicas para expresar los peligros que acechan la vida de las hermandades en su ponencia en el II congreso internacional . Farrell citó hasta seis referencias del Papa Francisco a los cofrades para desarrollar el título de su conferencia: «las hermandades: casa y escuela de vida cristiana, comunión y sinodalidad» En el catálogo de problemas apunto el monopolio de cargos, la repetición rutinaria y «el independentismo e individualismo » de nuestra sociedad. «Cuando las personas se esconden detrás del papel asignado prevalecen la lógica del poder y la afirmación del ego », dijo Farrell en una disertación muy pedagógica. Invitó a la escucha y al perdón que definió como «un aspecto crucial»: « no es aceptable que se guarde rencor , se hable mal, se rompan relaciones y no se vuelvan a hablar y se desaten guerras internas; es abiertamente contrario a lo que Jesús enseñó» En sus conclusiones, el camarlengo de la Iglesia dijo que las hermandades «no son novicios» en el camino de la Iglesia.