El precio de la vivienda subió un 8,1% en el tercer trimestre de este año con respecto al mismo período de 2023. En términos interanuales, el alza es tres décimas superior a la del trimestre previo y la más elevada desde el primer trimestre de 2022, cuando se incrementó en un 8,5%. Los datos son del Índice de Precios de Vivienda (IPV) publicado hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Así las cosas, los precios siguen en la tendencia alcista que arrancó hace ya más de diez años, en 2014, cuando se puso fin a la tregua que siguió al desastre inmobiliario de la crisis de 2008. Hay que recordar que a mediados de verano la obra nueva superó los 2.930 euros, cosa que no sucedía desde 2007. La historia se repite, pero esta vez el problema no es una burbuja, sino la escasez de oferta. El auge en julio-septiembre se explica por la vivienda de segunda mano, que se encareció un 7,9% con respecto a julio-septiembre de 2023, un aumento de 0,6 puntos respecto al registrado el trimestre anterior. El precio de la vivienda nueva, por su parte, se incrementó un 9,8% interanual, una tasa que es 1,4 puntos inferior a la del trimestre anterior. Por comunidades autónomas, las mayores alzas se dieron en la Comunidad Foral de Navarra (10,7%), Andalucía (10,6%) y Aragón (10,3%) . Y las menores, en Illes Balears (5,8%), Cataluña (6,8%), Principado de Asturias y Castilla-La Mancha (ambas 6,9%). Todas cerraron el trimestre con incrementos de precios.
