MICE: una oportunidad para los destinos y para la sociedad
El potencial del turismo de incentivo no deja lugar a dudas y eso tiene un impacto tanto en las empresas que apuestan por esta manera de cohesionar a sus empleados y clientes como en los destinos que fomentan la llegada de este tipo de viajeros. Las ventajas resultan numerosas, tal y como quedó demostrado en la tercera mesa redonda celebrada durante el Primer Incentive Summit & MICE Travel de I de MICE y LA RAZÓN el pasado 28 de noviembre.
Bajo el título de «Desafíos y Oportunidades de los destinos a través de los viajes de incentivo y el segmento MICE del turismo», esta mesa redonda exploró cómo los destinos se posicionan estratégicamente para captar el mercado de los viajes de incentivo como palanca de regeneración empresarial, económica y social. El coloquio fue moderado por José Luis Vázquez, managing director MICE en IAG7, y contó con la participación de Joan Manuel Barrena, consejero económico comercial del Perú en España; Laura Martínez Cerro, directora general de Turismo y Hostelería de la Comunidad de Madrid, y Yasuyuki Harada, director ejecutivo de la Oficina de Turismo de Japón en España.
Descentralización
Como no podía ser de otra forma, Martínez Cerro enfatizó que «Madrid está experimentando un crecimiento exponencial en turismo MICE, con un PIB turístico que ya alcanza el 8,6%». Asimismo, identificó como retos principales del sector «la descentralización hacia ciudades patrimoniales, para mostrar todo el potencial que hay más allá de la capital, y la desestacionalización, con el objetivo de alargar las oportunidades turísticas durante todo el año». Para ella, la solución que permitiría lograr estos objetivos debe partir de una «colaboración público-privada que permita optimizar la inversión en infraestructuras y la promoción internacional conjunta».
Por su parte, Harada compartió las estrategias de Japón para atraer turismo MICE, destacando «la fusión única entre tradición y modernidad, su gastronomía de reconocido prestigio mundial y la seguridad del país». Tal y como expuso, «Japón ha incrementado la inversión en infraestructuras, hoteles de lujo y vuelos internacionales, como el nuevo vuelo directo que ha habilitado Iberia, lo que hace que sea un destino más atractivo para el viajero español».
En este sentido, al igual que ocurre con la Comunidad de Madrid, Harada quiso subrayar «la importancia de diversificar la oferta MICE de Japón más allá de Tokio y Kioto, porque tenemos lugares muy singulares que ofrecen experiencias únicas y memorables al viajero, justo lo que demanda el sector MICE».
Por último, Barrena explicó cómo Perú «está trabajando en mejorar sus infraestructuras y conectividad para atraer más eventos internacionales». Reconoció que «España es un aliado estratégico en la promoción de Perú como destino MICE, ya que es uno de nuestros principales aliados en Europa». También destacó que «la gastronomía y la biodiversidad peruana son valores diferenciadores que pueden posicionar al país más allá de los destinos icónicos como el Machu Picchu, por eso debemos seguir trabajando en la promoción».
Dado que la colaboración público-privada es un factor determinante para seguir impulsando el turismo MICE dentro y fuera de nuestro país, la última parte del summit estuvo dedicada a mostrar la estrategia política al respecto. Así, Agustín Almodóbar Barceló, senador y secretario nacional de Turismo del Partido Popular, fue el encargado de pronunciar la ponencia «Relevancia del turismo en la economía y sociedad española. Impacto negativo del Real Decreto 933/2021 en el sector MICE». «La industria turística es la mejor carta de presentación de España en el mundo. Un sector que genera riqueza, puestos de trabajo, elimina barreras y que es capaz como pocos de democratizar la vida de nuestros pueblos y ciudades. Una industria que se ha convertido en la gran aliada del Estado pero que casi nunca el Estado la ha tenido entre sus prioridades», arrancó diciendo.
A falta de un modelo turístico
En opinión de Almodóbar Barceló, «el Gobierno de España sigue sin sentar las bases del modelo turístico español en un ciclo postpandemia tremendamente más competitivo a escala global y sin una hoja de ruta clara que pueda aportar certidumbre a empresarios, trabajadores y destinos. Pese a todo ello, es el turismo la industria que está tirando del carro de la economía y del empleo, ya que supuso más del 60% del crecimiento de la economía española en 2023. A pesar de ello, han relegado al turismo al 8 lugar en el ranking de prioridades de gasto».
Esa falta de empatía con el sector viene provocada, según Almodóbar Barceló, «por el enorme desconocimiento existente en el ámbito de la política del importantísimo papel del turismo». Y buena prueba de ello es el Real Decreto 933 de Registro de Viajeros, «un claro ejemplo del enorme desconocimiento por parte del Gobierno de la operativa turística, y permitirme también, una manifiesta dejación de funciones del ministro de Turismo, que, ante las continuas quejas, el malestar y múltiples peticiones por parte del sector, tendría que haber dado un golpe encima de la mesa del Consejo de Ministros en lugar de ponerse de perfil como ha hecho», lamentó el senador, quien insistió en que «no es recibo esta forma de legislar, tratando de imponer una serie de normas, dándole la espalda y sin contar con quienes tienen que aplicarlas, ya que este Real Decreto supone una pérdida de competitividad para España y una carga administrativa incomprensible e inadmisible para el sector, sin olvidar que también se trata de defender a los ciudadanos, a todo el que viaja por el motivo que sea, frente a este ataque a la intimidad que pretende el Gobierno».
La conclusión de Almodóbar Barceló sirvió para hacer hincapié en que «es fundamental considerar al turismo como una auténtica prioridad, hacerlo sería también hacer frente a esa creciente tendencia a cuestionar el turismo como una actividad depredadora para el territorio y molesta. Cuando un Estado adopta el turismo como una política pública prioritaria, invierte en su desarrollo mediante regulaciones, infraestructuras, promoción internacional y la creación de condiciones para la sostenibilidad y el crecimiento inclusivo, se mejoran las condiciones del conjunto de la sociedad».
Unas palabras que también suscribió Francisco Marhuenda, director de LA RAZÓN, durante la clausura del encuentro. Agradecido por la gran acogida de este foro, Marhuenda recalcó que «los viajes de incentivos son una parte muy importante de la industria turística y de la actividad empresarial, capaz de alargar la temporada y distribuir los beneficios». Además, insistió en que «el turismo es el gran petróleo de España y hay que seguir defendiéndolo».