Nerviosas y con los rostros tomados por el dolor, la madre y hermana de Paloma , la mujer de 46 años a la que presuntamente asesinó quien era su pareja, David Maroto, en la madrugada del 23 de enero de 2023 en su piso en el paso Zorrilla de Valladolid, así como a su hija, India, de ocho años, afrontan el juicio que este miércoles comienza con jurado popular en la Audiencia Provincial con la confianza de que quien se llevó a sus familiares pase el resto de sus días en prisión. «Creo que no va a salir de la cárcel. Tengo esa confianza plena», ha asegurado a la puerta de la Audiencia María Martínez, la madre y abuela de de Paloma e India. Ellas tendrán que declarar este jueves. Ya este miércoles, mientras se constituía el jurado y con el acusado ya en el edificio, asumían con nervios tener que ver cara a cara a quien les segó la vida de sus seres queridos. «Para mí, después del día de la muerte, es el peor día de mi vida porque tengo que volver a revivir todo aquello que pasó, sobre porque van a salir tantas cosas en el juicio, a veces que no conozco«, ha reconocido la madre. «Voy a sentirme muy mal», ha señalado, acompañada y apoyada por su hija. «Pero no hay otro remedio para que este individuo pueda llegar a donde la corresponde, que es la cárcel», ha sentenciado. No han recibido perdón personalmente ni de David Maroto, pero tampoco lo esperan. «No voy a perdonar ni olvidar. Soy católica, pero en este caso ha sido demasiado «, ha advertido María, quien ha recordado que Paloma »estaba ayudando« a quien desde hacía menos de un año era su pareja -con adicción al alcohol y otras sustancias- »y él le correspondió matándola a ella y a la niña«. »Así que no hay perdón«, ha advertido la madre y abuela de las víctimas del presunto asesino de ambas, que se enfrenta a una pena de 25 años de cárcel por la muerte de quien era su pareja -petición que comparten la fiscalía y las tres acusaciones- prisión permanente revisable por la de la pequeña India. Trasladado al penal de Perogordo, en Segovia, el pasado mes de julio, el acusado ha llegado a la Audiencia de Valladolid a bordo de un furgón de la Guardia Civil sobre las 8.50 horas, procedente de la prisión de Villanubla (Valladolid), a la que fue trasladado hace unos días de cara al juicio está previsto concluya antes del fin de semana. Él será el último en declarar, tras medio centenar de testigos y peritos.
