El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón , ha salido al rescate del sector pesquero en esta región -una de las más afectadas por las restricciones impuestas por la UE- con una inyección de 2,8 millones de euros para financiar cambios de redes y las puertas voladoras. También ha reclamado implicación estatal para ayudar a los afectados. Se posiciona así con los primeros en compensar estos recortes en la actividad, tal como ha asegurado este sábado en Alicante, tras la reunión que ha mantenido junto al conseller de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca, Miguel Barrachina , con representantes de las cofradías de pescadores de Alicante, Castellón y Valencia, según ha indicado la Generalitat en un comunicado. Mazón ha avanzado la puesta en marcha de una línea de fondos para financiar el 100% en el caso de las redes de todos los barcos de la Comunitat Valenciana «perjudicados por el acuerdo de la Unión Europea que reduce los días de pesca» y ha destacado que se podrán solicitar a partir del próximo lunes. «Esta línea de ayudas directas se habilitará de manera inmediata para que, antes de mayo, fecha impuesta en el acuerdo para aumentar los días de pesca autorizados por Europa», ha resaltado, al tiempo que ha agregado que el aumento está condicionado al cumplimiento de una serie de requisitos como el tamaño de las redes, el tipo de puertas o la realización de vedas selectivas. Para ello, ha precisado Mazón, «se destinarán 12.500 euros de media por embarcación para que adquieran al menos cuatro redes nuevas con las medidas establecidas por el acuerdo europeo», es decir, de 45 milímetros, en el caso de que realicen pesca costera, y de 50 milímetros, en el caso de la de profundidad. El máximo representante del Gobierno valenciano también ha asegurado que se están ultimando otras medidas de apoyo al sector pesquero para «respaldarles tras las condiciones impuestas y poder aumentar, todavía más, los días de pesca, subvencionando, con el mayor porcentaje posible, el cambio de las puertas voladoras». En este sentido, ha puesto en valor la «reacción inmediata de la Generalitat que no va a permitir que está situación de acoso se prolongue», frente a las, a su juicio, «incomprensibles decisiones tomadas por la Unión Europa, con el silencio del Gobierno que pone en riesgo un sector productivo clave que da sustento a miles de familias en la Comunitat Valenciana». Al respecto, ha señalado que las repercusiones económicas no se limitan únicamente a los buques de pesca, sino que ha apuntado que también afectan a las cofradías , las lonjas , los mayoristas de pescado, las pescaderías y un amplio número de empresas que depende de esta actividad, como los mecánicos navales, rederos, calafates y astilleros, así como la hostelería y el turismo. Al mismo tiempo, ha exigido al Gobierno de España que «repare la poca influencia y la ineficacia demostrada en la negociación en la Unión Europea» y ha reclamado el apoyo estatal con el fin de evitar su «desmantelamiento». Asimismo, ha lamentado que, en los últimos años, «con el actual Gobierno de España se ha pasado de faenar 200 días a apenas 30» con el actual acuerdo de la UE y con «más restricciones a nuestros barcos», mientras que otros competidores del Mediterráneo han duplicado o triplicado su flota pesquera. Por último, ha indicado que el Consell ha adoptado medidas como la eliminación de las tasas de la Generalitat a los barcos pesqueros en los puertos de la Comunitat por lo que «a partir del próximo 1 de enero de 2025 ningún barco de pesca pagará esas tasas», o la creación de una dirección general de Pesca.
