Albornoz repasa sus movimientos
Sin el nivel de la mayoría de sus ediciones, cuando el número de Grandes Maestros era superior, así como la cantidad de países, hace pocos días finalizó la más reciente versión del Torneo Internacional Carlos Torre Repetto in memoriam de ajedrez, en Yucatán, México. Esta vez el certamen contó con ocho apartados y en algunos de ellos compitieron trebejistas de Cuba.
El grupo principal nuevamente fue el Magistral y en él intervinieron varios cubanos, entre ellos el camagüeyano Carlos Daniel Albornoz, quien integró el equipo de la Isla que terminó en el puesto 46 en la Olimpiada Mundial de Budapest, Hungría, en septiembre.
Carlos Daniel, tercero del ranking inicial, por detrás del peruano nacionalizado mexicano José Eduardo Martínez y del peruano Jorge Cori, descansó al final en la cuarta posición, gracias a seis rayitas, resultado de cuatro victorias, igual número de empates y un fracaso. El agramontino era uno de los principales aspirantes a obtener el cetro, respaldado también por su condición de triple monarca de la lid (ganó en las ediciones de 2018, 2019 y 2023). El pasado año se colocó la diadema luego de acumular siete puntos de nueve posibles (cinco triunfos y cuatro igualadas).
Sobre su actuación en el último Memorial Carlos Torre y otros aspectos de su trayectoria en 2024 conversó Carlos Daniel con Juventud Rebelde.
«Podría decir que mi desempeño en el Carlos Torre fue aceptable, pues perdí un punto de mi Elo en vivo. Caí en una sola partida y fue por un detalle. Me toca trabajar con más seriedad en esos errores con vistas a los próximos eventos. De manera general, fue otra experiencia que ayudó a mejorar mi ajedrez. Tuve como objetivo mantener la corona en mi poder, pero fue bien difícil, sobre todo por la presencia de dos jugadores peruanos muy exigentes en sus estilos de juego».
—Antes de esta justa, participaste en el Open Internacional Gran Hotel Bali 2024, en Benidorm, España, donde culminaste en la segunda plaza, con siete puntos.
—Me sentí bastante bien en ese torneo en Benidorm, con condiciones muy buenas. Empecé excelente, tras vencer en las primeras cinco partidas, pero en la sexta sufrí mi única derrota. El revés ocurrió en una jornada de doble ronda. Ese resultado ante un rival de menos Elo provocó que descendiera en la tabla de posiciones y perdiera algunos puntos de mi Elo. Posteriormente, quizá no tuve el mejor cierre, pues hice dos tablas seguidas que me alejaron un poco del primer escaño.
«Sin embargo, en el último duelo gané y eso me sirvió para igualar en la cima, pero, por desempate, acabé segundo. Creo que tuve un buen certamen en cuanto a la calidad de las partidas, exceptuando la que perdí».
—Por último, Carlos, dame tus impresiones acerca de tu rendimiento en un 2024 con mucho ajedrez para ti.
—Puedo dividir el año en dos partes. La primera hasta mayo, aproximadamente, que estuvo muy bien, pues logré el pico de Elo más alto en mi carrera, 2614, y además terminé segundo en el grupo Élite del Memorial Internacional Capablanca, en La Habana. Luego estuve en algunos certámenes en los cuales no rendí lo esperado, incluso en el Festival Internacional de Abu Dhabi perdí alrededor de 20 puntos y descendí de los 2600. Posteriormente no pude subir mi Elo en eventos que concursé en Portugal, España y México.
«Un momento importante en esta temporada fue la Olimpiada Mundial en Budapest, donde enfrenté a varios jugadores de gran nivel y resumo mi experiencia allí como positiva. Realmente no fue mi mejor año, pero seguí superándome como jugador».