Caracas amanecía de forma inusual este jueves. Por la ventana entraba el ruido de un excesivo tráfico que no suele frecuentar estas calles, el motivo eran las cinco tarimas con altavoces que el chavismo erigió a lo largo de la avenida Francisco de Miranda –una de las principales del este caraqueño– para la marcha oficialista. Uno de estos escenarios estaba ubicado justo en el cruce con la calle Elice , uno de los cuatro puntos de concentración de la protesta opositora. Y estaba claro que se trataba de una medida de disuasión y amedrentamiento, pues fue la marcha opositora la primera en ser anunciada. El chavismo, en la profunda división que ha sembrado en el país, también separó los espacios...
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