Victoria del Silicius Alcobendas B, pese a todo.

Primer partido del año, derbi contra el Cisneros saldado con una victoria con bonus por 10-22.
Un derbi siempre es esperado con ilusión, además llevamos tres semanas de pausa por las
navidades, todos teníamos ganas de empezar. La tarde luce luminosa, aunque hace un poco de
viento. Los dos equipos saben hacer un juego vistoso y en la tabla les separan solo dos puntos.
Estaban presentes todos los alicientes para ver un gran partido.
Pronto se nos complicaría la cosa. En el minuto 6, Pablo al intentar parar un ataque, no cierra
bien el placaje y el contrario choca de cabeza con su hombro. El árbitro considera que es juego
peligroso y le muestra la primera amarilla.
Pese a ello, no nos descompusimos, nuestra defensa evitó dos ocasiones rivales sobre nuestra
línea de marca. Aunque no terminábamos de dominar el juego, íbamos avanzando sin balón,
merced a una defensa presionante que les hacía perder metros en cada fase.
La primera vez que enlazamos una jugada a la mano nos plantamos en su 22 y obtenemos un
golpe a favor centrado que decidimos jugar a la mano; el balón le llega a Albert quien consigue
vencer la oposición de los defensas y marca los primeros puntos del partido. Es el minuto 16,
recuperamos el jugador expulsado con ventaja en el marcador 0-5.
Los minutos siguientes se jugaron en su mitad, pero varios errores con las manos nos impidieron
aumentar la diferencia. Empezábamos a acumular golpes en contra que nos costaban muchos
metros. En esta primera mitad cometeríamos diez, frente a los cinco que tendríamos a favor.
Pese a ello, logramos que apenas pisaran nuestra 22.
La parte final de la primera parte condicionaría el partido. Tanto para un equipo como para el
otro. Volvimos a ver de cerca sus palos. Tras un gran slalom de Lio, llegamos a su marca, pero
bloquearon el oval. El saque le vuelve a Lio y de nuevo nos metemos en su zona, un par de fases
para fijar a sus gordos y sacamos al ala para que Nahón haga el segundo ensayo en el minuto
38. 0-10.
No querían irse a cero al descanso y nos llevaron hacia atrás, aguantamos varias fases en 5
metros, pero cometiendo incorrecciones, lo que costo una nueva amarilla. Esta vez fue a Kaki
por falta reiterada. Insistieron en entrar por el centro y en la siguiente jugada, llega la segunda
amarilla a Pablo, de nuevo por no cerrar el placaje. Nos quedábamos con trece, y toda la segunda
parte con uno menos. Pero conseguimos que no entraran. Minutos agobiantes defendiendo a
5 metros, varias melés, y otro golpe en contra alargaban la agonía. No quisieron tirar a palos e
intentaron entrar una y otra vez hasta que cometieron un retenido. Descanso 0-10.
A poco de empezar el segundo tiempo, con dos más en el campo consiguen acercarse en el
marcador con un golpe de castigo, 3-10. Se ponen a tiro de ensayo. Va a tocar sufrir. Pero
recuperamos a Kaki. Y en la primera jugada tras el saque, Dani Velasco les gana la espalda y
consigue el tercer ensayo. Aznar completa la jugada y ponemos un 3-17 que nos llena de moral
para la media hora restante.
Seguimos aguantando, aunque su superioridad numérica se convierte en ventaja de campo.
Ahora se juega en nuestra mitad y a menudo en nuestra 22. Comienza el carrusel de cambios
para oxigenar el equipo. De nuevo abusamos de las incorrecciones, las pocas veces que
llegábamos a su campo, perdíamos la opción por errores en los rucks.
Tras una incursión de ellos por el centro, Monchi placa al atacante, pero el árbitro entiende que
con un placaje alto y le saca una nueva amarilla. Es el minuto 56 y estamos otra vez con trece.
Casi aguantamos los 10 minutos sin que puntuaran, pero a base de conceder golpes. Nuestra
intensidad defensiva tenía ese coste, pero resultó efectiva. Su melé empezó a dominar y en lugar
de pedir palos, querían entrar jugando.
Llegó la jugada absurda del partido. Apurando la superioridad, llevaron el balón hasta el ala que
entraba solo. Su linier lo celebró antes de tiempo y sus aspavientos hicieron creer al árbitro que
el jugador había pisado la línea de touche y paró el juego.
En la jugada siguiente consiguieron moverla de banda a banda y entrar hasta la marca, la patada
posterior le ponía de nuevo a tiro de ensayo 10-17 en el minuto 70. Para reanudar el partido
recuperábamos a Monchi, lo que iba a resultar providencial.
De nuevo íbamos a responder con rapidez. Solo dos minutos después, una patada larga de Aznar
lleva el balón a su marca. La coge el zaguero y al intentar alejarla con el pie, Monchi bloquea la
patada y recoge el balón sin oposición para lograr el ensayo que nos daba el bonus. 10-22.
Cada vez que conseguían puntuar se la devolvimos de inmediato. La moral cambió de bando y
volvimos a jugar en su campo. Ya no tenían fuerzas, ni ánimo para jugar. Pero aún quedaba el
estrambote. Tras una melé a su favor en mitad de su campo, Kaki intercepta el pase del 9 y el
árbitro considera que es avant intencionado por lo que le saca otra amarilla. La quinta del
partido. La segunda para él. De nuevo con trece, por tercera vez en el partido. Pero ya no daría
más de sí.
Enorme el esfuerzo de hoy. Victoria épica. Cincuenta minutos en inferioridad. Veinte de ellos
con dos jugadores menos. Diecinueve golpes en contra por siete a favor. Gran actitud y mucha
seriedad en defensa. Cualquiera podría pensar que tras tres semanas sin jugar y con cuatro
jugadores nuevos en el equipo, la concentración no sería la adecuada. No fue así. Quizás la
adversidad de vernos con uno menos tan pronto, nos permitió fijar la actitud y hacer frente con
más fuerza. Quizás el rival lo vio más fácil y se relajó. El caso es que se consiguió una victoria
importante que nos reafirma en el objetivo de llegar a DHB.
Siguiente paso, un nuevo derbi con los vecinos de Sanse. Vamos ARU. Sin pausa.
José Ramón Quesada.

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