La Policía Nacional busca a los implicados en dos sucesos con armas de fuego de por medio sucedidos con apenas siete horas de diferencia en la capital: el primero, en un narcopiso de Villa de Vallecas; y el otro, en plena vía pública de Usera, bajo la sombra de las bandas latinas: los investigadores creen que los atacantes son de los Dominican Don't Play, aunque el joven herido no tiene adscripción a ninguna organización criminal ni antecedentes. Las víctimas de ambos casos , al cierre de esta edición, se encontraban en estado grave, hospitalizados. El primero de los sucesos tuvo lugar en torno a las cuatro de la tarde en una vivienda del bulevar de la Naturaleza, en el distrito vallecano. Un residente de la finca alertó a los servicios de emergencias de que su vecino de enfrente se encontraba tirado en la puerta del piso, malherido y sangrando. Según indicó, había escuchado algo de ruido y, al observar qué ocurría a través de la mirilla, pudo ver a dos hombres, «de aspecto latino y encapuchados», abandonando rápidamente la finca. Apuntó, asimismo, que uno de ellos iba vestido «todo de blanco», señalan a este periódico fuentes de la investigación. Los agentes creen que se trata de dos traficantes que acudieron a dar un vuelco (como se denomina en el argot al robo de una partida de droga) y que, de hecho, se marcharon con los estupefacientes con los que trapicheaban las dos víctimas y que tenían encima de una mesa, lista para su venta. En el interior del domicilio se produjo una bronca importante y dispararon a uno de los vendedores, de 44 años. Le dieron en la cabeza, con orificio de entrada pero no de salida, y fue trasladado al hospital Gregorio Marañón muy grave. A su compañero, que también estaba en la casa, le agredieron pero de manera leve. El Grupo V de Homicidios y el de Delitos Violentos (DEVI) de la Policía Científica se ha hecho cargo de las pesquisas y ha hallado un casquillo del calibre 22, muy utilizado por sicarios y narcos colombianos. Por lo pronto, los dos varones que estaban en el narcopiso quedaron arrestados por un presunto delito de tráfico de drogas. Ahora, los agentes indagan en el paradero de los pistoleros , para lo que, además de tomar declaración a las víctimas, están recabando imágenes de las cámaras de seguridad, entre otras pesquisas. Ya de noche, en torno a las 23.20 horas, un joven venezolano de 20 años fue atacado por un grupo de supuestos pandilleros cuando caminaba cerca de su casa, en la calle de Tomelloso, a la altura del número 20, entre Almendrales y el hospital 12 de Octubre (Usera). Los datos que se manejan apuntan a que podrían estar siguiéndole. Una furgoneta oscura, en la que viajaban, según los testigos, seis personas, se paró y le abordaron. Le dispararon en una o dos ocasiones, alcanzándole un proyectil en el pecho. Luego, le intentaron degollar con un bolomachete. La víctima, como suele ocurrir en ataques de ese tipo, tuvo el acto reflejo de intentar defenderse con el brazo, por lo que recibió un corte en la mano derecha, además de otro tajo en la cabeza. Quedó sentado en la vía pública, sangrando abundantemente. Los viandantes asistieron primero al muchacho y avisaron a los servicios de emergencias. El Samur-Protección Civil lo encontró aún consciente y lo trasladó al 12 de Octubre en estado grave, informan fuentes de Emergencias Madrid. Kevin, la víctima, llevaba poco tiempo en España y no estaba relacionado con ninguna banda ni tiene pasado delictivo, precisan fuentes de toda solvencia. Se trabaja con que los agresores sean miembros de los Dominican Don't Play (DDP), una de las dos organizaciones criminales juveniles dominantes, junto a los Trinitarios. Al cierre de esta edición, no estaba clara la motivación del ataque. Los agresores podrían haber utilizado una 'chilena', que es como se conoce a las pistolas de fogueo o de 'airsoft' que manipulan para convertirlas en detonadoras.