La limpieza de los espacios públicos es algo que muchas veces damos por hecho. Nos acostumbramos a ver calles, parques y edificios libres de suciedad, pero pocas veces pensamos en el esfuerzo y el trabajo que hay detrás de todo ello Evidentemente, no todas las tareas de limpieza conllevan el mismo esfuerzo. Los ayuntamientos, al subcontratar estos servicios, deben aprobar unos presupuestos específicos para cada espacio, el tiempo necesario para realizar el trabajo y los materiales requeridos. Sin embargo, lo que muchas veces se pasa por alto es el tiempo dedicado a preparar esos presupuestos. Sobre este tema ha hablado recientemente la usuaria de TikTok @rosa.ecosanes, una emprendedora ecuatoriana que dirige un negocio de limpieza en España. Rosa utiliza sus redes sociales para compartir consejos sobre emprendimiento y visibilizar las dificultades que enfrenta el sector de la limpieza. En uno de sus últimos vídeos, muestra cómo acude a un trabajo potencial para evaluar las condiciones de limpieza de una pared, dejando claro que ese tiempo dedicado a realizar una cata inicial y elaborar un presupuesto debe ser reconocido y pagado. Cuando Rosa llega a la pared en cuestión, se encuentra con un escenario complicado: está cubierta de marcas de celo y cinta adhesiva que han dejado restos pegajosos y difíciles de eliminar. Ante esta situación, explica que dedicará la jornada a probar diferentes productos y técnicas para determinar cuál será la mejor solución para dejar la superficie en óptimas condiciones. Este proceso, explica, es también una inversión de tiempo que debe ser considerada en el presupuesto final. En este caso, además, gastará varios productos sobre una pequeña parte de la superficie antes de proponer una solución integral, lo que deberá ser también remunerado. «El coste de esta primera evaluación se incluye en el presupuesto total del trabajo. Si el cliente acepta, esta cantidad se descuenta del precio final; si no, se cobra como un servicio independiente», explica Rosa al final del vídeo. De esta forma, se asegura de que su tiempo invertido es recompensado.