Otro gran enfado del juez del caso Rubiales en la declaración de Montse Tomé: "¿Le pegamos para que diga lo que usted quiere?"

La Audiencia Nacional ha celebrado este lunes una nueva sesión del juicio a Luis Rubiales por el beso a Jenni Hermoso en la final del Mundial femenino de fútbol, en la que ha declarado la seleccionadora nacional, Montse Tomé y en la que el juez del caso ha vuelto a ser protagonista.

La actual seleccionadora nacional en su día fue protagonista por acudir a la Asamblea de la Federación en la que Luis Rubiales, por entonces presidente, anunció que no dimitiría. «Me dijo Jorge Vilda que tenía que ir. Me llamó para decirme que tenía que estar. Yo estaba de vacaciones», ha explicado Tomé.

Tras ello, preguntada sobre el protocolo de acoso y el motivo por el cual no se activó el mismo, la entrenadora respondió con un «no sé». Una pregunta que ha derivado en el cabreo del juez José Manuel Clemente Fernández-Prieto.

«Le pegamos para que diga lo que usted quiere», le espetó a la abogada de la AFE el juez al considerar que dicha pregunta parecía que se estaba enjuiciando a la entrenadora, quien comparecía en calidad de testigo y no de acusada, y que además se estaba excediendo en el objeto de lo que se estaba juzgando. Algo que también ha repetido a la fiscal: «No estamos enjuiciando a la testigo». La misma ha terminado protestando.

Finalmente, Tomé respondió contundente: «No fue un castigo. Ningún castigo». Esta no es la primera vez que el juez del caso interrumpe alguna declaración por las preguntas de los letrados o de la fiscal a los testigos. En las sesiones del juicio de la semana pasada, Fernández-Prieto se cabreó en numerosas ocasiones al considerar que las preguntas estaban fuera de lugar.